La UE ha aprobado hoy un texto de compromiso para iniciar con el Parlamento Europeo las negociaciones sobre los nuevos requisitos de capital para la banca europea, después de que el Reino Unido y Bulgaria se sumaran al consenso. Sin embargo este no satisface a todos los países y tanto la Comisión Europea como el Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Bancaria Europea han expresado sus reservas, pero confian en poder mejorar el texto en el llamado "trílogo" entre los países miembros, el Ejecutivo comunitario y el Parlamento Europeo.
La ministra danesa de Economía, Margrethe Vestager, que preside el Consejo de ministros del ramo de la UE (Ecofin), constató en el debate público que "nadie" está en contra del texto y que "todos están de acuerdo" en avanzar con el compromiso que tiene el fin de blindar a la banca ante futuras crisis.
Ahora nos encontramos en una posición mucho más sólida de cara a las negociaciones con el Parlamento Europeo y ante el mundo, porque Europa demuestra así que está haciendo sus deberes en su respuesta a la crisis", afirmó, después de que el 2 de mayo el Ecofin fracasara en su intento de forjar un consenso, tras 16 horas de negociaciones.
El texto adapta a la legislación comunitaria y a más de 8.300 bancos europeos las normas del acuerdo internacional de solvencia bancaria Basilea III, que entrará en vigor el 1 de enero de 2013 y que exigirá a la banca tener un coeficiente mínimo de capital ordinario del 4,5 % de los activos ponderados por riesgo, un capital de máxima calidad del 6 % y un capital total del 8 %.
Más flexibilidad
El compromiso introduce más flexibilidad a nivel nacional para que los países miembros puedan endurecer los requisitos.En concreto, el texto permite a los países miembros imponer un colchón sistémico adicional de hasta el 3 % del capital para todas las exposiciones -nacional, en terceros países y en otros socios de la UE- y de hasta el 5 % para las domésticas y las de fuera del bloque, sin permiso previo de la Comisión Europea.
Si quieren incrementar las reservas de capital todavía más, tendrán que recibir el visto bueno de la Comisión, que tiene que garantizar el principio de no discriminación o de lo contrario poner en marcha un proceso de infracción.Este colchón se sumaría a la reserva de conservación de capital del 2,5 % para todos los bancos en la UE y al anticíclico, que se fijará a nivel nacional y que se creará en tiempos de crecimiento económico, que puede llegar hasta el 2,5 %.
Los Estados miembros podrán asimismo imponer, durante un máximo de dos años ampliables, requisitos más duros para las entidades en su territorio, como por ejemplo para el nivel de fondos propios, exigencias para grandes exposiciones, la publicación de los datos, los colchones de conservación, la liquidez y riesgos ponderados, con el fin de hacer frente a burbujas. La Comisión también podrá imponer para un año medidas más duras. Finalmente también se incluirá provisiones para la introducción de un requisito de liquidez inicial a partir de 2013 y de un coeficiente de apalancamiento a partir del 1 de enero de 2018, en base a un informe que elaborará la Comisión Europea en 2016