Las autonomías han vuelto a engordar su déficit y el del Estado. Del 8,5% que reconoció el Gobierno hace poco más de un mes el agujero público crece hasta el 8,9%. Dos comunidades reconocen que las cifras que remitieron en su día no eran veraces: Madrid, cuyo déficit del 2,2% es el doble del declarado, del 1,13% y la Comunidad Valenciana, que tiene un déficit real del 4,5% frente al 3,7% previsto. En total, 4.000 millones de déficit no declarado.
Los dos gobiernos autonómicos aseguran que el desfase se produjo “por la caída de ingresos el año pasado”. Sin embargo, sus contabilidades se cerraron el 15 de enero y la última declaración de déficit se produjo en marzo. Por ello, sorprende que ninguno de los dos ejecutivos se percatara durante los dos meses y medio que tardaron en elaborar sus primeras cuentas de una caída de ingresos ocurrida en 2011.
El argumento de la “caída de ingresos” contradice, además, el proporcionado por Hacienda que afirma que “se debe fundamentalmente a la operación del pago a proveedores, que ha supuesto una auténtica circularización (sic) de deudas pendientes”.
El ministro Montoro aseguró 24 horas antes de corregir la cifra de déficit que “se había dado un paso fundamental en la credibilidad de España”
La sorpresa del nuevo déficit que deberá corregir el remitido a Bruselas hace unas semanas supone un golpe claro a la credibilidad de las cuentas de España. El agujero español será 4.000 millones mayor del declarado y el déficit registrará un 8,9% frente al 8,5% reportado a Bruselas. Pese al nuevo giro, el ministro de Hacienda aseguraba un día antes que la presentación de las nuevas cifras suponía “dar un paso fundamental en la credibilidad de España” y que los planes autonómicos iban a ser "fundamentales para recuperar la confianza y para seguir avanzando en la confianza de nuestros socios europeos y los mercados".
Con las cuentas pasadas comprometidas, Hacienda se esforzó anoche por dar credibilidad a sus compromisos de futuro. En una nota pública, el Ejecutivo sostiene que “mantiene la previsión de alcanzar este año el 5,3% de déficit del PIB para el conjunto de las Administraciones y del 1,5% para las Comunidades Autónomas”.
Galicia y Asturias corrigen sus cifras
Galicia también se desvía de su contabilidad oficial pero por motivos técnicos. El Gobierno de Núñez Feijoo esperaba un déficit del 1,6% y ha terminado registrando un agujero del 4,4%. Sin embargo, Galicia no aflora déficit oculto sino que registra en sus libros que está pendiente de recibir fondos por la implantación del nuevo sistema de financiación autonómica de 2009. Esos fondos que no ha cobrado pero que el Estado debe abonarle son los que explican la desviación de sus cuentas.
Por el contrario, Asturias mejora las cifras previstas y frente al 3,74% estimado sólo registra un déficit del 1,3%, una cifra que deberá ratificar el nuevo gobierno cuando tome posesión la semana que viene y que será el punto de partida sobre el que se construya el plan de ajuste que el gobierno de Oviedo debe presentar en 15 días.
El Gobierno también culpa a Andalucía
Hacienda aseguró anoche en una nota pública que la desviación se debía “al aumento del déficit de la Comunidad de Madrid y de Valencia, y en menor medida a Andalucía y Castilla-León (sic)”. Sin embargo, mientras Castilla y León sí registró un déficit un 0,24% mayor que el anunciado, Andalucía calcó la cifra que había proporcionado anteriormente.