Con el precio del aceite de oliva por las nubes y una sequía persistente, los agricultores sevillanos se enfrentan a la campaña de la aceituna de mesa sin mano de obra en la provincia. Y no tienen las mismas posibilidades de contratar en origen al igual que en provincias como Huelva. El motivo lo explican desde ASAJA Sevilla a Vozpópuli: “No es posible contratar en origen, porque teóricamente hay mucha mano de obra desempleada en la provincia; por tanto, no se puede contratar de fuera”.

Este problema se vuelve más complicado cuando esa mano de obra agraria desempleada no acepta el trabajo de la recolección. Entonces, el fruto se recoge como buenamente se puede, tirando de cuadrillas conocidas que hacen un esfuerzo, de amigos o incluso de estudiantes. La falta de mano de obra en el sector de aceituna de mesa ha llevado, de hecho, a muchos productores a reconvertir sus cultivos a aceituna de molino, donde la recolección está mas mecanizada y no se necesita tanta mano de obra. “En los últimos diez años se han arrancado un millón de olivos de aceituna de mesa”, confirman desde ASAJA Sevilla.

La situación de algunos sectores del campo andaluz es dramática, pero, según la organización, lo que no es positivo es eliminar las peonadas. ”Estamos en contra de eliminarlas. Que no se ponga la excusa de que no hay trabajo en el campo, porque trabajo hay. En el campo falta mano de obra todo el año y para campañas como esta, más”.

Si observamos en la campaña del arroz es obvio que, si solo se ha sembrado el 5%, no se necesite una mano de obra tan amplia como anteriores ocasiones; es necesario realizar las labores de cuidado que exige la política agraria común PAC, aunque no se haya sembrado el total. Por tanto, según la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores, esas informaciones contradictorias (afirmar que en el campo no hay trabajo) hace que las cuadrillas que antes venían a Andalucía en esta época hayan dejado de hacerlo.

Trabajadores cualificados

Uno de los principales problemas del campo andaluz, dejando a un lado las asfixiantes políticas de Bruselas por las que ya han dicho basta agricultores y ganaderos, es la falta de mano de obra especializada. La maquinaria cada vez es más compleja, los abonos y el riego se realizan mediante sistemas digitales. Pero además de esta preparación más tecnológica e innovadora, hay profesiones como la de la poda, que también se están perdiendo y son de vital importancia en el campo. Lejos de las campañas, el campo necesita personas formadas, capaces de manejar un tractor con dispositivos digitales, con aperos delante y detrás. “Eso hay que buscarlo potenciando una Formación Profesional dedicada a ello”, señalan desde Asaja.

"La mano de obra es un problema en todo el campo español, pero sobre todo y de manera más acusada en el campo andaluz”. A esto se le suma la dramática situación en la que la sequía está dejando a ganaderos y agricultores. Todo se vuelve en contra a un sector fundamental en la economía andaluza, que con las nuevas políticas europeas cada vez le es más difícil poder salir adelante.

Aumento de los robos

Otro de los grandes problemas para los que el campo no estaba preparado, y son difíciles de evitar, son los robos. Con el precio del aceite rozando límites impensables, el oro líquido, nunca mejor dicho, está siendo lo más codiciado por los ladrones. Las almazaras y los olivares están siendo objeto de saqueos por parte de los cacos, que además de dejar los árboles sin aceitunas los destrozan y provocan no solo la pérdida de la cosecha de este año sino la del próximo.

ASAJA Sevilla ha confirmado que se está reuniendo con los agricultores de las diferentes comarcas y con la Guardia Civil para intentar proteger los campos de la oleada de robos. “Nos hemos centrado en la zona de Estepa porque no estaban organizados y necesitaban más ayuda, la zona del Aljarafe y la de Arahal están conectadas en grupos de Whatsapp en los que hay miembros de los grupos ROCA (Robos en el campo) de la Guardia Civil”.

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