"No habrá eurobonos mientras yo esté viva", dijo el martes la canciller alemana Ángela Merkel al primer ministro italiano Mario Monti. La inflexible postura alemana condena a los países periféricos a facturas de deuda que no pueden pagar y el proyecto de la divisa común parece herido de muerte. Con estas condiciones, los mercados no rezuman optimismo como solía ser habitual antes de las cumbres europeas y las primas de riesgo periféricas (entre ellas la española, en 534 puntos básicos) apenas se mueven. El bono español está ya muy cerca del 7% de nuevo (un 6,86%) y el italiano se encuentra en 6,16%.
La renta variable tampoco es optimista, aunque en el arranque de la sesión (primeros 20 minutos) todos los grandes índices están en verde excepto un sorprendente Cac 40, índice parisino que se desploma por encima del 2% cuando todos suben.