Este verano toca renovar la cúpula del Banco de España. Y ya empiezan a sonar con fuerza entre los círculos financieros los candidatos mejor posicionados en la carrera a suceder como gobernador a Pablo Hernández de Cos. Tanto José Manuel Campa como David Vegara ganan enteros en las quinielas tras cerrarse la puerta como posibles ministros de Economía, según trasladan a Vozpópuli fuentes financieras cercanas al banco central.
Con el nombramiento de Carlos Cuerpo como titular de la cartera económica, Campa y Vegara estarán en la lista de candidatos “fuertes” a gobernador por su cercanía al PSOE, según las fuentes consultas. De hecho, ambos fueron secretarios de Estado de Economía durante los Gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero.
Campa se ha labrado un reconocido prestigio en el sector financiero por su experiencia internacional y en la empresa privada. Pasó por el Banco Santander, donde fue el director de relaciones con inversores durante cinco años, y ahora es presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), el regulador bancario europeo que dirige junto al BCE los test de estrés al sector financiero.
Campa quiere volver a España
El exsecretario de Estado, que combina un perfil técnico y político, admite en privado que estaría dispuesto a dar el paso y dejar París, la sede de la EBA, según fuentes financieras. Campa llegó en 2019 al regulador bancario europeo, que ya trabaja para extender su mandato a 2029, lo que podría complicar su regreso a España, según las fuentes.
"David Vegara rechazó ser ministro de Economía tras la salida de Calviño al BEI. Pero el puesto de gobernador es más apetecible
Vegara ejerce en la actualidad como director de riesgos del Sabadell y ya sonó como subgobernador del Banco de España antes de la moción de censura a Mariano Rajoy y que instaló a Pedro Sánchez en La Moncloa. El banquero, según fuentes próximas a Sabadell, descartó desde un primer momento su candidatura a suceder a Nadia Calviño, aunque el puesto de gobernador podría ser más ‘apetecible’.
Ambos serían candidatos híbridos. El ascenso de Hernández de Cos en junio de 2018 rompió una tradición en la cúpula del supervisor al ser un técnico especializado en macroeconomía y sin un corte ideológico identificado. Esta ‘revolución’ se culminó meses después de su ascenso con el nombramiento de Margarita Delgado como subgobernadora. Por primera vez, la cúpula del Banco de España estaba lideraba por dos expertos muy ligados a la regulación bancaria europea.
¿La primera mujer gobernadora?
Delgado, cuyo mandato de seis años expira en agosto, también suena entre los círculos financieros como candidata a dar el relevo a su ‘jefe’ actual. Aunque juega en su contra precisamente su perfil menos político, como indican fuentes próximas al banco central, que, de todas formas, consideran que a su favor puede empujar que por primera vez sea una mujer la máxima autoridad del Banco de España.
La actual subgobernadora estuvo a punto de dar el salto al BCE como nueva jefa de supervisión, pero el Gobierno no apoyó todo lo necesario su candidatura para no entorpecer el desembarco de Nadia Calviño como presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), un organismo de menor relevancia que el sillón que estaba vacante en el supervisor único europeo.
Tradicionalmente PP y PSOE han consensuado el nombramiento del gobernador y del subgobernador. Se trataba de una regla no escrita en la que el partido del Gobierno designaba al máximo responsable del Banco de España y el principal partido de la oposición a su número dos.
Lo habitual es que los partidos mantengan conversaciones para renovar la cúpula, aunque no es necesario que pacten los nombres, sino que más bien dejen claro quién designa a quién, según fuentes próximas al Banco de España.
La incógnita de Escrivá
Tampoco se descarta que Sánchez elija a José Luis Escrivá, que en el nuevo Gabinete de Sánchez ha perdido Seguridad Social y asumido una de las competencias que tenía Calviño, Transformación Digital, y se perfilaba como futuro ministro de Economía como economista de carrera y por su conocimiento de los entresijos de Bruselas. Finalmente Escrivá asumió Función Pública en el nuevo Gobierno de coalición, pero se quedó sin una de las tres vicepresidencias.
El sillón de la conocida como 'cuota catalana' en el Banco de España está vacío, tras la salida el pasado marzo de la economista Nuria Mas, y también se debe renovar este año el puesto de Soledad Núñez, que concluye su mandato en septiembre, pero con posibilidad de renovar otros seis años más.