El Gobierno amaga con irrumpir en el mercado hipotecario. El Ejecutivo legislará para proteger a los hipotecados más vulnerables por la subida del euribor y la crisis de precios si el sector bancario no es capaz de pactar medidas para aliviar a estas familias, según fuentes conocedoras consultadas por Vozpópuli. Esta es la intención que se ha deslizado en los encuentros bilaterales con las entidades y a nivel sectorial en los últimos días.

De hecho, Unidad Podemos presiona a Pedro Sánchez para topar la subida de las cuotas hipotecarias. Ya ha registrado una proposición de ley en el Congreso para limitar la subida de las hipotecas variables al 0,1% y pedirá incluirlo en el plan anticrisis. Por esta razón, el sector bancario echará el resto para encontrar una solución sectorial a los hipotecados más vulnerables. Se estima que alrededor de un millón de hipotecas variables, alrededor del 17% de este tipo de préstamos, entrarían en riesgo de impago en un momento de debilidad económica y crisis de precios.

El Gobierno no ha puesto una fecha límite, pero está decidido a actuar si el sector bancario no "arrima el hombro", como viene pidiendo Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos. Sin ir más lejos, este es uno de los argumentos 'estrella' del Ejecutivo para defender el impuesto a los bancos para recaudar 3.000 millones de euros en dos años.

"Si el Gobierno interviene será peor para los bancos. Hay que buscar un acuerdo, aunque sea de mínimos, para que no nos ocurra como con el 'impuestazo'", señalan desde una de las grandes entidades del Ibex. En las conversaciones con el Gobierno, el sector intenta que la predisposición para ayudar a los hipotecados más vulnerables al menos sirva para suavizar el nuevo gravamen durante la tramitación parlamentaria.

Planes personalizados

Las entidades se están moviendo para evitar un estallido de la morosidad en plena crisis inflacionaria y ante los tambores de recesión económica. Cada banco cuenta con su plan "personalizado" para cada cliente y hay discrepancias sobre qué medidas tomar, como quedó demostrado con la propuesta de CaixaBank de congelar las cuotas hipotecarias durante un año, que desde algunas entidades se ha criticado por ser una iniciativa a medida del banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri, que está blindado al vaivén del euribor por el mayor peso de las hipotecas fijas en su balance.

Las patronales AEB y CECA apurarán esta semana los contactos para tratar de consensuar alguna medida, indican varias fuentes del sector. Ahora bien, la sensación es que, en caso de haber acuerdo, será de mínimos y servirá más para escenificar un pacto, como señalan desde varias entidades. Se trataría de actualizar el código de buenas prácticas a la situación de precios tensionados y la posible entrada en recesión. Fuentes oficiales de AEB y CECA prefirieron no hacer comentarios al respecto.

Próxima reunión con el Gobierno

Está previsto una reunión con el Ministerio de Economía en los próximos días, a la cual los bancos ya quieren llegar con un acuerdo sectorial. Entre las soluciones, están sobre la mesa recuperar las moratorias hipotecarias de la era Covid y alargar el plazo de devolución de los préstamos.

En el caso de las moratorias, que permitirían aplazar el pago del capital pero abonando los intereses, se está negociando con el Banco Central Europeo (BCE) una relajación de la normativa bancaria para que no impliquen un aumento de las provisiones, como publicó este medio.

El BCE ha llevado los tipos al 1,25% en menos de tres meses y se esperan nuevas subidas para atajar la inflación. Este cambio de paso está provocando un rally en el euribor, que cerró septiembre en máximos desde 2009, por encima del 2,2%. Se anotó así seis meses encadenando subidas, lo que encarecerá la cuota hipotecarias en más de 200 euros mensuales.

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