La imputación de ocho ex altos cargos del Banco de España y la CNMV fue bien recibida en determinados despachos del Ibex 35. Compañías como Iberdrola, Meliá Hotels International y Grupo Villar Mir (que controla OHL) incorporarán la resolución de la Audiencia Nacional a su estrategia de ataque contra Bankia por la salida a bolsa, según fuentes próximas a las empresas consultadas por Vozpópuli.
Estas tres compañías tienen en trámite demandas contra la entidad nacionalizada para recuperar el dinero que perdieron por acudir a la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de julio de 2011. Iberdrola reclama 12,4 millones; el grupo controlado por Juan Miguel Villar Mir, algo más de 20 millones; y la empresa hotelera presidida por Gabriel Escarrer, en torno a un millón de euros. Duro Felguera, la otra gran cotizada que ha demandado al banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri, ha retirado su demanda en las últimas semanas.
La batalla entre estas compañías y Bankia es de altos vuelos, sobre todo la de Iberdrola, en la que ambos grupos están poniendo toda su maquinaria jurídica a funcionar. Por un lado están las empresas demandantes, que alegan que al igual que los inversores particulares, compraron acciones de Bankia con información financiera falsa. De hecho, todos los pequeños ahorradores de la OPS han recuperado ya su dinero.
Contraataque
Por su parte, Bankia se apoya en dos ideas: la sentencia del Tribunal Supremo de hace un año, que dejó fuera de la posible recuperación del dinero a los grandes inversores, porque disponían de más información; y en el hecho de que gran parte de las empresas acudieron a la salida a bolsa empujadas por el Gobierno de entonces, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero. Así, ya hay alguna sentencia que fija que los grupos cuya motivación para acudir a la salida a bolsa fuera esta, no pueden reclamar a Bankia.
En medio de esta disputa técnica, ha surgido la imputación del exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez; el expresidente de la CNMV, Julio Segura, y otros seis ex altos cargos de los supervisores españoles.
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Desde el entorno de los demandantes del Ibex aseguran que esta medida les viene muy bien y que la van a intentar aprovechar. Creen que si los propios responsables de los reguladores han sido imputados por, presuntamente, tapar la “falacia” de las cuentas de Bankia, ellos serían una víctima más.
La batalla contra los grandes inversores institucionales no es una cuestión crítica para Bankia, ya que el golpe está acotado a un máximo de 600 millones de euros. Teniendo en cuenta que Mapfre ha optado por el momento por no demandar, este importe se reduce a 300 millones. Y la cifra total de demandas dista mucho de llegar a esta cifra.
Pero para el grupo presidido por Goirigolzarri sí que es clave imponerse en cada una de estas batallas para poner fin de una vez por todas a la herencia de la salida a bolsa y poder centrar sus recursos en el nuevo plan estratégico en lugar de en el pasado.