La banca online come terreno a la tradicional en depósitos. Las entidades electrónicas atesoran un récord de 58.569 millones de euros en este producto de ahorro con datos a junio de este año. Se trata de un incremento superior al 10% respecto al segundo trimestre de 2021 en la antesala a que el Banco Central Europeo (BCE) iniciara las subidas históricas de los tipos de interés.
Las entidades electrónicas, incluidas las filiales a distancia de los grandes bancos, suponen ya el 3,86% del total del sistema, la cota más alta desde que el Banco de España reporta estadísticas sobre esta parte del sector financiero, que arrancó en marzo de 2003.
El cambio en la política monetaria para atajar la inflación ha llevado el precio del dinero al 1,25% y la facilidad de depósito al 0,75%. Este último es el tipo que fija el interés que las entidades de crédito reciben por sus depósitos a un día en el banco central y que llevaba en negativo desde junio de 2014.
Este movimiento del BCE ha llevado a varias entidades online a mejorar su oferta en cuentas remuneradas y anticipa una guerra del pasivo, aunque los grandes bancos se resisten a entrar y apuestan por el momento por los fondos de inversión, que ofrecen rentabilidades más atractivas para los clientes en un contexto de inflación descontrolada. ING fue el primero en cambiar la estrategia tras el giro del BCE. Ha anunciado que desde el 1 de noviembre potenciará el atractivo de su cuenta estrella: la cuenta Naranja.
Tras años con una rentabilidad congelada en el 0,01%, la entidad de origen holandés subirá el rendimiento al 0,30%, sin condiciones ni límites. Y además ha suprimido la comisión de custodia. Sólo un día después, MyInvestor, el neobanco controlado por Andbank, El Corte Inglés y AXA, anunció que subirá el tope de saldos a remunerar con el 1% de los 20.000 a los 30.000 euros.
La banca tradicional se reconvierte en online
Los bancos tradicionales están canalizando sus mejores ofertas en cuentas remuneradas a sus modelos digitales. Este es el caso de Sabadell, que ofrece hasta un 2% por contratar su cuenta online para remunerar saldos de hasta 30.000 euros. Sin embargo, Bankinter tiene en el escaparate de sus sucursales una de las cuentas más rentables del mercado y que ha mantenido en los últimos años pese a los tipos negativos. Ofrece un 5% TAE, que incluye todas las comisiones, el primer año para un máximo de 5.000 euros. Pero como condición exige domiciliar ingresos de 800 euros.
La banca online lleva tiempo ganando terreno a las entidades tradicionales. Durante la era de los tipos negativos, las grandes entidades intensificaron el ahorro de costes como medida para combatir la atonía de ingresos. El cierre de oficinas y ajuste de plantillas se acompañaron además de un impulso de las comisiones por la operativa más rutinaria, como las transferencias. Esta estrategia provocó un trasvase de clientes a las modalidades online. De hecho, algunas entidades ya hacen más del 50% las ventas por canales remotos.
La banca online gana peso tras la pandemia
La pandemia provocó un aumento de la digitalización, que también se ha percibido en los depósitos que atesoran las entidades electrónicas. Desde marzo de 2020, cuando irrumpió con fuerza el Covid en Europa, la banca online ha captado casi 10.000 millones más en depósitos. Una tendencia que se puede acelerar con la nueva política monetaria.
De momento, los bancos tradicionales retrasan la batalla por el pasivo. "Hasta ahora los depósitos era un negocio que perdía dinero. Ahora empezará a normalizarse. En periodo de tipos negativos los depósitos a plazo han desaparecido, pero tendrá que seguir subiendo el BCE los tipos para que aumenten las remuneraciones”, advirtió José Antonio Álvarez, consejero delegado de Banco Santander.
Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, fue incluso más contundente sobre la posibilidad de que las grandes entidades apuesten fuerte por captar ahorro. “Nuestra estrategia es no remunerar los depósitos”, dijo.