Víctor de Aldama está desvelando ante el juez del caso Koldo todas las incógnitas sobre la famosa visita furtiva a España de Delcy Rodríguez. El comisionista, que está declarando a petición propia en esta causa de corrupción, ha confesado que "todos" sabían que venía a España y que preparó una cena de la vicepresidenta de Venezuela con cinco ministros del Gobierno.
Fuentes jurídicas confirman a Vozpópuli que el empresario ha reconocido la existencia de todas las comunicaciones intercambiadas con la número dos de Nicolás Maduro y que la anotación de "cena con M" que se aprecia en la agenda que le preparó efectivamente responde a los ministros del actual Ejecutivo. Las mismas fuentes aseguran que ha identificado a Fernando Grande-Marlaska, Teresa Ribera, Salvador Illa, María Jesús Montero y José Luis Ábalos. El presidente también estaba convocado.
En relación con lo ocurrido la madrugada del 20 de enero de 2020 en Barajas, Aldama ha explicado que él estuvo allí y que llegó a subir al avión de Delcy Rodríguez junto con Ábalos y su entonces asesor, Koldo García. Además, ha confesado que el ministro del Interior -que se ha desligado de este episodio en numerosas ocasiones- creó una zona en el aeropuerto para poder trasladarla.
Enfado del Gobierno de Maduro
El motivo de la visita, según ha indicado en su declaración, se debe al conflicto que había surgido con el Gobierno venezolano por la intención de Moncloa de reconocer a Juan Guaidó. Ante el posible estallido de un conflico, se le pidió "intervenir" a Aldama. Él preguntó de qué manera podría mediar y que por qué no lo hacía directamente la entonces ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González-Laya. "Se contestó que la ministra no sabía ni donde tenía la mano derecha ni izquierda", ha dicho.
Finalmente se le terminó enviando al empresario, el cual ha reconocido que antes de cumplir la misión pidió un mandato para demostrar que iba como representante de España. Por ello, Ábalos expidió una carta que entregó a Guaidó cuando llegó al país bolivariano. Ese gesto provocó el enfado del Gobierno de Nicolás Maduro y, propició los preparativos de una futura visita de Delcy Rodriguez.
Aldama ha asegurado que el Gobierno estaba enterado por Marlaska, Ábalos y Sánchez de la visita de Delcy. La misma se produjo para apaciguar un enfado de Maduro con el Ejecutivo
En relación a este viaje furtivo ha asegurado que estaba enterado todo el Gobierno y que incluso desde la presidencia del Gobierno se trasladó a Delcy Rodríguez que estuviera tranquila en relación a las sanciones que pesaban sobre ella y que le impidieron permanecer en suelo español. Es más, la 'número dos' de Maduro advirtió que no quería que "jugaran" con ellos".
Prueba de que la visita iba en serio reside en la mansión que alquilaron para ella a través de una plataforma de Internet en el madrileño barrio del Viso. Al hilo ha dicho que se adoptaron "todas" las medidas de seguridad para garantizarle protección durante los días que iba a estar en España. De nuevo implica al Ministerio de Marlaska por cuanto que dice que la Policía y el CNI iban a revisar la casa donde se iba a alojar y también la embajada de Venezuela.
Casa en el Viso y seguridad de Interior
Durante esos tres días Delcy Rodríguez no solo tenía previsto reunirse con empresarios de la órbita de Maduro, sino también con la fiscal general del Estado. Aldama no ha especificado exactamente qué persona era, si bien en el momento de los hechos ejercía en funciones María José Segarra, que fue sucedida por Dolores Delgado. La reunión, según ha indicado, se produjo a tenor del interés de Venezuela de "recuperar" al exjefe de la Inteligencia militar de dicho país, Hugo 'El Pollo' Carvajal.
"Tenía mucho interés en recuperar a esta persona o extraditarla, y por eso se hizo esa reunión. Estaba prevista y hablada entre el fisacl general de Venezuela y el español", ha asegurado el comisionista. Cabe recordar que la Audiencia Nacional terminó entregándolo a Estados Unidos pese a que, para evitarlo, se convirtió en testigo clave de la causa que se siguió en este órgano contra Podemos por presunta financiación irregular.
La investigación de la UCO en torno a la figura de Víctor de Aldama en el conocido como 'caso Koldo', ya daba algunas pistas de que la visita de vicepresidenta de Maduro no fue un episodio aislado y fortuito, como ha defendido todo este tiempo el Ejecutivo de Sánchez. Los mensajes desvelados por la Guardia Civil entre el comisionista de la trama y Delcy Rodríguez, reflejan tal y como ha reconocido Aldama este miércoles en sede judicial, que la visita de la venezolana era algo que "todos" conocían. Delcy Rodríguez viajó a Madrid con toda una agenda preparada con semanas de antelación y Sánchez estaba al tanto.
El sumario de la causa dirigida por el juez Ismael Moreno, desveló que la vicepresidenta venezolana esperaba que su recibimiento en el aeropuerto de Barajas el 19 de enero fuese muy diferente. "Llegada al aeropuerto de Madrid. Sala de autoridades presencia policía y escoltas recogida y llegada al lugar", decía la agenda planificada por el propio Aldama.
Cena con "todos los M"
Al día siguiente, el 20 de enero, el exdueño del Zamora CF anotó entre las citas diseñadas para su invitada especial una reunión con el CEO de Duro Felguera y con "el jefe", un calificativo con el que Aldama se refería a Ábalos. A la noche, la agenda de Delcy Rodríguez apuntaba a figuras de más alto nivel, "cena en restaurante cerrado con todos los M. Viene también el M de Sanidad", rezaba la nota. Ahora, Aldama aclara al juez que con dicho calificativo se refería, efectivamente, a los ministros del Gobierno de Sánchez.
Además de la reunión agendada con todos los ministros, la intervención de los mensajes de Aldama desveló que el presidente del Gobierno estaba al tanto del viaje de Delcy Rodríguez. Ábalos informó a Sánchez por privado: "La vicepresidenta de Venezuela viene en privado el lunes y quiere verme discretamente como continuación del encuentro que tuve con el ministro de comunicación. La gestión que acordamos en favor de las empresas españolas ha permitido que Duro Felguera haya cobrado una importante deuda".
Relación de Delcy Aldama y el rastro del oro
Las conversaciones entre Delcy Rodríguez y Aldama, desveladas por la UCO, muestran que entre ambos existía una importante complicidad. Vic, como se refería al empresario la vicepresidenta de Venezuela, se convirtió en su hombre de confianza; tanto es así que semanas antes se firmó un contrato de compraventa de oro con el país caribeño.
Entre los objetos requisados por la Guardia Civil al comisionista de la trama Koldo, se encontró un MacBook en el que aparecía la fotografía de un contrato firmado por el Fondo de Desarrollo Nacional de Venezuela (FONDEN) por el cual ofrecía 104 barras de oro a Bancasa por 68 millones de dólares americanos. El acuerdo fotografiado por el empresario zamorano que logró introducirse en las entrañas del Ministerio dirigido por Ábalos añadía que la entrega del oro debía realizarse entre el 27 de diciembre de 2019 y el 6 de enero de 2020. Pocas semanas después, se produjo la fugaz visita de Delcy a España.
Precisamente, el rastro de ese oro ha sido una de las mayores incógnitas que han rodeado desde entonces a la enigmática visita de la vicepresidenta del Gobierno de Maduro aquella noche del 19 de enero de 2020. Desde entonces, el Gobierno ha negado que ese oro fuera trasladado en maletas esa misma noche.
MataNarcisos
21/11/2024 11:51
Como pus de herida infectada, poco a poco, van saliendo todas las "impurezas" ahora solo falta aplicar un buen desinfectante, y eliminar a todas las bacterias asentadas en la herida. Tic, Tac....
jgarejula2
Fráudez no tiene alma.
giledu
21/11/2024 12:07
Nada ocurrirá. Mucho escándalo mediático, el que dejen sin control estatal, pero a la postre la clase política se resguarda de sus fechorías. Han ido generando una maraña de protección a lo largo de los años que impide que la justicia haga lo que realmente se necesitaría.
esnalar
21/11/2024 14:40
Ahora entiendo por qué hay diarios que no admiten comentarios. Si Pedro Sánchez dice dos palabras, y tres son mentira, blanco y en botella.