El Banco de España ha pedido este martes en el Congreso de los Diputados que el Gobierno ponga en marcha una agenda de reformas estructurales ambiciosa de manera urgente, para poder enfrentar los retos de la economía española que son más "apremiantes" tras la crisis del coronavirus.
"Permítanme que les exponga las razones que, a mi juicio, justifican la puesta en marcha, de manera urgente, de una estrategia ambiciosa, integral, permanente y evaluable de reformas estructurales y de consolidación fiscal. La estrategia deberá ser ambiciosa. La magnitud de los retos a los que se enfrenta la economía española demanda esa ambición, si verdaderamente se aspira a sentar las bases de un crecimiento sostenible y equilibrado", ha pedido el gobernador de la institución, Pablo Hernández de Cos.
El gobernador ha pedido que el Ejecutivo empiece a definir ya el plan de consolidación fiscal para atajar el déficit público, ya que aunque no se aplique hasta que se recupere el crecimiento económico, dará una imagen de credibilidad de la política económica. Ha pedido también que esta estrategia, aunque sea diseñada por el Ejecutivo, alcance el mayor consenso posible.
"La estrategia debería desplegarse con vocación de permanencia. Por ello, resulta fundamental que alcance un alto grado de consenso. En mi intervención ante la Comisión de Economía del Congreso, a la que antes aludí, hice mención a la necesidad de un acuerdo político que abarcara varias legislaturas. Me reafirmo hoy en esa necesidad", ha apuntado.
Ha pedido también que la estrategia pueda ser evaluada a medio plazo. "Adoptar esta cultura de evaluación en el diseño de la política económica debería ser uno de sus pilares", ha apuntado.
Qué reformas ha pedido para España
Productividad. De Cos ha señalado que "el principal factor explicativo del bajo crecimiento potencial de la economía española es el escaso crecimiento de la productividad", que ha crecido en los últimos veinte años a una tasa del 0,2%, muy por debajo de la registrada en Alemania o Estados Unidos. Por ello, ha pedido que se fomente la dinámica y crecimiento empresarial, para aumentar la competencia sectorial, que se mejore el capital humano y el capital tecnológico.
Desempleo. "El segundo objetivo de la agenda de reformas debería ser atender a los desafíos del mercado de trabajo, cuyas deficiencias son evidentes, como muestra que, desde 1980, la tasa de paro promedio en España se ha situado en casi el 17 %". En este sentido, ha pedido reformas para reducir la temporalidad del empleo y mejorar las políticas activas de empleo.
Envejecimiento. El tercer reto debe ser afrontar el envejecimiento poblacional, con medidas que favorezcan la conciliación, una adaptación de la política migratoria para acompasarla a las necesidades del mercado de trabajo, y una reforma integral del sistema de pensiones.
Inclusión. "Debe abordarse el reto que supone el incremento de la desigualdad", con medidas como el diseño y la aplicación adecuados del Ingreso Mínimo Vital, y políticas de acceso a la vivienda.
Finalmente, ha pedido reformas para combatir el cambio climático y facilitar la transición hacia una economía sostenible; mantener un sistema financiero saneado; afrontar los nuevos retos estructurales tras el coronavirus (proceso de globalización de la producción, proceso de digitalización); reforma de la gobernanza europea; y garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas.
Medidas a corto plazo
De cara a los próximos meses, el gobernador ha considerado que "tendría sentido extender los ERTE en algunos sectores o empresas que seguirán muy afectados por las medidas de distanciamiento social. Y, en paralelo, debe asegurarse el correcto funcionamiento de los diferentes mecanismos de flexibilidad disponibles para las empresas, cuyo papel es especialmente útil para permitir potenciales ajustes estructurales derivados de la crisis".
Además, ha pedido nuevas medidas de políticas activas de empleo y de formación para desempleados y trabajadores suspendidos temporalmente. Estas medidas tendrían como objetivo mantener su empleabilidad y facilitar su recolocación en aquellos sectores o empresas con mayor capacidad de crecimiento.
