Un inspector de la UDEF ha declarado hoy en el juicio de Gürtel que el extesorero del PP Luis Bárcenas inició una operativa de "descapitalización" de sus cuentas en Suiza desde las que se produjeron "salidas que suman un total de 10 millones de euros" cuando comenzó la investigación contra la trama.
Tres inspectores han declarado en calidad de peritos-testigos en el juicio que se celebra en la Audiencia Nacional y han explicado que detectaron un cambio en la manera en la que Bárcenas gestionaba sus cuentas en Suiza, donde llegó a acumular 48,2 millones de euros, cuando se inició la investigación en 2009.
Desde ese momento, "se produce una descapitalización de esas cuentas" con trasvases de hasta 10 millones de euros entre ellas. Uno de los inspectores ha apuntado que el objetivo de esa operativa era la "despatrimonialización" de fondos pues "todas las justificaciones de Bárcenas, Iván Yáñez (su presunto testaferro) y Ángel Sanchís (extesorero de Alianza Popular), se han demostrado falsas".
"Se adoptan por parte de Luis Bárcenas una serie de acciones tendentes a poner a salvo parte de su patrimonio en Suiza, entre ellas, la sociedad Granda Global, que se crea meses después al operativo policial y dentro del tiempo en que Bárcenas expropia sus fondos a Reino Unido", ha señalado el agente.
Según los inspectores, al saber que estaban investigando a la trama, Bárcenas comenzó a evitar viajar a Suiza, optó por hablar "en ámbitos privados" e inició una operativa de envío de transferencias al exterior y al cierre de cuentas.
Han destacado también los agentes que el extesorero tenía "otra fuente de ingresos totalmente desconocida" para la Policía que se mezclaba con los fondos que le entregaba el líder de la trama, Francisco Correa.
"Hemos observado que existe otra fuente de ingresos hasta ahora desconocida que Bárcenas utiliza para ingresar fondos en Suiza. A todas luces parece ilícita porque todas las explicaciones dadas por Bárcenas se han demostrado falsas. Ni son provenientes de negocios inmobiliarios, ni de arte, ni de sus sociedades", ha recalcado uno de los inspectores.
Otra agente de la UDEF ha sido interrogada por un informe en el que se atribuye al exconsejero madrileño Alberto López Viejo, acusado en el juicio, haber cobrado casi 400.000 euros de la trama de comisiones por haber intermediado en contratos de la Comunidad de Madrid adjudicados a empresas de Correa.
La policía ha confirmado los indicios de que el exconsejero cobró esas dádivas, afirmando que disponen de documentos de entregas de dinero a López Viejo que coinciden con anotaciones en la caja B de Gürtel.
"A mí me coincide, no sé a qué se refiere con disparidad de fechas y cantidades", ha respondido al abogado de López Viejo cuando ha puesto en duda las conclusiones del informe.
En concreto, López Viejo habría recibido, según la UDEF, un 10 por ciento de los contratos que ayudaba a adjudicar, cantidades que se anotaban como una partida de "varios" en las hojas de coste de esos actos que organizaban las empresas de Correa.