Tres horas y media de interrogatorio dividida en dos sesiones. Así ha sido el primer día de declaración de BBVA en el marco de la pieza número nueve del caso Villarejo. El primero, porque según han confirmado a Vozpópuli fuentes jurídicas, el representante legal del banco tendrá que volver a la Audiencia Nacional para seguir respondiendo a las preguntas que quedan pendientes en la causa.
La entidad, imputada como persona jurídica en la pieza nueve del caso Tándem, ha acudido este miércoles, a las 9.25 horas, a sede judicial para declarar por presuntos delitos de cohecho, revelación de secretos y corrupción en los negocios. La citación tiene lugar después de que el expresidente del banco Francisco González declarara también como investigado por los presuntos negocios ilícitos entre BBVA y el comisario jubilado.
Según fuentes cercanas a la investigación, el representante legal del banco, Adolfo Fraguas, ha respondido a preguntas de la Fiscalía anticorrupción y del juez. La entidad, que ya había avisado de su disposición a colaborar con la Justicia y había aportado un informe de auditoría interna sobre los contratos con Villarejo, ha participado en un intenso interrogatorio que se ha dividido en dos sesiones -una por la mañana y otra por la tarde-, ya que el magistrado Manuel García Castellón tuvo que hacer un receso para celebrar las vistillas a cuatro de los CDR detenidos.
Cohecho y corrupción
BBVA está siendo investigado en el caso Tándem desde el pasado julio, cuando el magistrado Manuel García-Castellón acordó la imputación del banco por hechos que serían constitutivos de los delitos de cohecho, descubrimiento y revelación de secretos y corrupción en los negocios.
La decisión del juez se produjo después de que el ministerio público presentara un informe en el que explicaba que el BBVA -dirigido por González- contrató al entramado del comisario para trabajos "de naturaleza patrimonial y carácter ilícito". En este sentido, los fiscales también advirtieron de que varios directivos investigados habrían percibido dádivas del entorno del Grupo Cenyt -propiedad de Villarejo- a cambio de contrataciones.