El juez Manuel García-Castellón ha cambiado el enfoque en la pieza novena del caso Tandem y ha endurecido las preguntas hacia el socio de 'forensic' de PwC Javier López Andreo después de que éste explicara en su primera declaración en febrero que apenas se había analizado el 10% de toda la información recopilada en el 'forensic' encargado por BBVA.
El magistrado ha hecho una serie de preguntas a López Andreo que el experto no ha sabido responder. Una de las más curiosas, según fuentes jurídicas presentes en la sala, ha sido la de si tenía por contrato defender el peritaje realizado para el banco y Garrigues ante los tribunales. A este respecto, el declarante no ha dado una respuesta clara, quizás por desconocimiento, apuntas las mismas fuentes.
Pero no sólo esto, García-Castellón también se habría interesado por si el socio de la 'Big Four' factura estas horas de juicio como tiempo de trabajo. Asimismo, de la declaración se desprende que López Andreo habría tenido varias reuniones con BBVA y Garrigues en las que se ha preparado su 'defensa', apuntan las fuentes presentes consultadas por Vozpópuli. Este medio se ha puesto en contacto con el banco, pero no ha querido hacer declaraciones al respecto.
Tanto el juez, como las acusaciones del caso y la Fiscalía Anticorrupción han pedido al responsable del 'forensic' que entregue los 223 correos electrónicos que PwC se negó a enviar a la Audiencia Nacional ante la prohibición de BBVA. El magistrado ha dado una especie de 'ultimatum' de una semana a López Andreo para que los entregue o por el contrario podría enfrentarse a una acusación por desobediencia.
El perito se escuda en el derecho al secreto profesional, al igual que BBVA, pero el magistrado le ha advertido ya en varias ocasiones de que en su caso no le ampara este derecho y que su deber es aportar al caso todo el trabajo que ha realizado hasta el momento.
Sólo el 10% de la información
En su primera declaración, Andreo reconoció que el 'forensic' sólo había analizado el 10% de la información con la que cuenta el banco. Al inicio de la investigación, PwC ofreció a los abogados de la entidad (Garrigues y Uría) un mapa de calor con todas las líneas de investigación que proponían realizar y que suponía la revisión de un total de 2,3 millones de hits (ítems a revisar).
Según las estimaciones proporcionadas por la consultora, el tiempo de ejecución de esta revisión ascendía a dos años. En este contexto y ante la necesidad de dar respuesta a los requerimientos judiciales, los abogados de la defensa proporcionaron a la firma unos criterios de priorización que "maximizaban la posibilidad de obtener información relevante para el caso", explican fuentes de BBVA, que añaden que "en ningún momento se descartó la revisión del resto".
De hecho, el banco ha añadido líneas adicionales a la investigación como consecuencia de peticiones del propio Juez. El informe de PwC lo encargó a comienzos de 2019 el actual presidente del BBVA, Carlos Torres Vila, si bien antes, con Francisco González en la presidencia del banco, hizo abrir una investigación interna.
Otros frentes
Ese mismo día, los fiscales del 'caso Villarejo' sacaron a relucir durante el interrogatorio, un documento excel depositado en Google Drive en el que el banco recogía las cuentas de Luis Pineda y familiares cercanos. Según fuentes jurídicas presentes en la sala, la Fiscalía preguntó al experto de la consultora por este archivo al entender que existen indicios de que este fichero podría ser otro encargo del banco al excomisario Villarejo.
De acuerdo con el criterio de los fiscales, esta tarea concreta se habría materializado presuntamente en una serie de documentos en formato excel y ficheros de texto (también aportados por BBVA), en los que se listarían movimientos bancarios de don Luis Pineda y su entorno.
No obstante, según un escrito de la propia entidad, incluido en el sumario al que ha tenido acceso Vozpópuli, este documento provendría de la instrucción del caso Ausbanc, causa en la que BBVA como parte personada tuvo acceso. En particular, esta documentación obra en una pieza separada denominada “Información bancaria”, en la que se cuenta con documentación proveniente de un gran número de entidades financieras.