Madrid se convertirá en una de las capitales emergentes del tráfico en Internet. Es la puerta de entrada a Europa y muchos cables transoceánicos provenientes de otros continentes utilizan España como punta de lanza. Esto, sumado a la bajada de los precios del transito IP -el pago que las grandes compañías realizan por mover el tráfico de sus usuarios de un país a otro-, augura un incremento muy grande del tráfico en Madrid y, por ende, en España.
"El descenso en el precio del tránsito de Internet en Madrid generará una enorme cantidad de tráfico en esta ciudad en los próximos dos años. No es descabellado pensar que esta ciudad pueda convertirse en una de las capitales del intercambio de Internet, como ya lo es Londres. No en vano Madrid es el lugar que más rápido crece de todo el mundo en este sentido", ha asegurado Ivo Ivanov, CEO de DE-CIX, compañía dedicada a intercambiar Internet entre compañías, servicios y el cliente final. Se trata de una corporación propiedad de Eco Association, entidad sin ánimo de lucro.
Cuando usted y yo nos conectamos a Netflix, Facebook o consultamos nuestra cuenta de Gmail, la petición viaja hasta Estados Unidos -o allí donde se encuentre guardada la información-, coge lo que necesita y muestra en pantalla la lista de correos actualizados, los nuevos posts de nuestros contactos o la portada de Netflix con las últimas novedades.
Londres, Amsterdam y Frankfurt han sido hasta ahora los puntos calientes del tráfico que entraba en Europa, pero España, con Madrid a la cabeza, está llamada a ser otra de las ciudades líderes en este sentido. Uno de los motivos de este crecimiento es la llegada a la capital de empresas de gestión del tráfico que encuentran en nuestro país un precio por la electricidad más contenido que en Reino Unido, Holanda o Alemania.
DE-CIX posee desde hace dos años instalaciones de interconexión en la capital de España, y gestiona el tráfico de empresas como Google, Apple, Amazon, Microsoft o Netflix, entre otras. Por ellos pasa parte de la información que luego se redistribuye por Europa. Su modelo de negocio reside en la cuota mensual que le pagan los clientes por la gestión del tráfico que se produce en los centros de datos (Data Center).
A escala global, los 1.300 clientes que DE-CIX posee en todo el mundo conectan más de 100 países, cuatro continentes y generan 7TB de tráfico por segundo.
En Madrid, el coste mensual por una conexión más o menos estándar -cinco conexiones de fibra cruzadas- es de 1.279 euros al mes. En Londres, por lo mismo, una empresa debe pagar 2.430 euros. Madrid es un 90 por ciento más económica que Londres
Volvamos a Madrid. Los llamados precios por el tránsito IP han bajado mucho tanto por la entrada de más actores a este mercado -para ahorrar en costes eléctricos- como por los ajustes -segundo factor del futuro incremento de tráfico- en los precios que grandes empresas como Google han impuesto al mercado. El tercer motivo es la creciente demanda de tráfico por parte de los propios usuarios españoles. El uso de Google o Facebook aumenta a un ritmo mucho mayor que en otros países, explican desde DE-CIX.
En Madrid el coste mensual para una empresa por una conectividad más o menos estándar -10Gbps, es decir, cada segundo se trafican 10 unidades de datos- era hace tres años de 1.279 euros al mes. En Londres, por lo mismo, una compañía debía pagar 2.430 euros. Hoy el precio en Madrid está en el entorno de los 900 euros. Madrid es un 100% más económica que Londres.
Hay múltiples formas de llevar de un lugar a otro cada paquete de datos. Hay empresas que conectan con otras empresas con cables dedicados. DE-CIX propone otro modelo basado en que las empresas se conecten a un único punto -y compartan infraestructuras- y a partir de ahí se redistribuya el tráfico donde se desee.
La compañía, que opera desde hace 23 años con Frankfurt como sede central, tiene también nodos de intercambio de Internet en Nueva York, Berlín, Estambul o Dubai. Hasta 13 en todo el mundo. Es significativo que los grandes puntos de intercambio o confluencia de Internet sean aquellos en los que hay otros grandes nodos de sectores diferentes.
"La información siempre llega a puntos en los que hay mucho negocio, a grandes ciudades con muchas infraestructuras ferroviarias o aeropuertos. Esto se explica porque son grandes centros financieros y logísticos, y ahí es donde se concentra la mayor parte del tráfico de Internet tanto de destino como de salida", explica Ivanov.