El Sector Ferroviario de CCOO ha asegurado este lunes que existe la posibilidad de que convoque huelga en Renfe durante el mes de julio si la compañía no cumple sus compromisos de más empleo, una distribución de la jornada negociada y la consolidación de los incrementos salariales correspondientes a los años 2017 y 2018.
Así lo señala CCOO en un comunicado, en el que explica que, de momento, ha convocado una concentración en la estación de Atocha el próximo jueves, 27 de junio, y que toma esta decisión por “la forma dictatorial de gestionar los derechos de los trabajadores y trabajadoras mostrada por la dirección del grupo”.
En cuanto a la creación de empleo, según explica Manuel Nicolás Taguas, secretario general del Sector Ferroviario de CCOO, “la dirección de Renfe miente cuando nos venden una tasa de reposición del 105%, porque si bien es verdad que la Administración ha autorizado 49 nuevos contratos indefinidos, estas contrataciones han sido usadas por la empresa para desvincular al mismo número de trabajadores. Por lo tanto, no se crea empleo. Hay tantos ingresos como jubilaciones o desvinculaciones en la empresa”.
La denuncia de CCOO
Por otro lado, denuncia que Renfe ha decidido imponer unilateralmente la distribución de la jornada anual de 1.642 horas, cuando la ley establece que la jornada de trabajo general en el sector público se computará en cuantía anual y supondrá un promedio semanal de 37,5 horas, dejando a la negociación colectiva la aplicación de la misma.
“No vamos a bajar los brazos y renunciar a un derecho que posibilita la conciliación de nuestra vida personal y laboral. No podemos permitir que esta disminución de la jornada anual quede en 17 minutos de reducción diaria que en nada ayuda a la atención de nuestros hijos y familiares dependientes, además de que esta distribución impuesta unilateralmente por la empresa es más perjudicial para la productividad y la prestación del servicio que la propuesta por CCOO”, subraya Taguas.
Jornada de ocho horas
En concreto, el sindicato propone continuar con la jornada diaria de ocho horas y acumular el resto de horas, que suponen 10 días de descanso al año a pactar su disfrute entre las partes.
Por último, exige a la empresa la consolidación de las cantidades abonadas en concepto de incentivo adicional ligado a la evolución favorable en los resultados del Grupo Renfe, referidos a los años 2017 y 2018.