Mario Draghi dijo que haría lo necesario para que sobreviviera el euro y que “será suficiente”, un discurso sostenido durante todos estos meses, que ha facilitado que el CDS (Credit Default Swap, seguro por impago de la deuda española que cotiza en los mercados financieros) bajara con fuerza desde 640 puntos, su máximo histórico. Desde entonces, ha tenido una sostenida caída, hasta el entorno de los 350 actuales, que deja este precio en cotas previa a la implementación de la primera subasta LTRO (Long Term Refinancing Operation) aprobada hace casi un año. O sea, el riesgo de impago de España está de nuevo en cotas previas a las medidas de emergencia.
La cifra apuntada mide la prima a abonar ante la posibilidad de impago de 10 millones de dólares colocados en deuda española. Esos 640 puntos indican que la cobertura cuesta 640.000 dólares y, a su vez, los 350, 350.000 dólares. El asunto es destacable, porque en las inyecciones de liquidez anteriores bajaron puntualmente las primas de riesgo, pero no los CDS.
El anuncio de las dos subastas LTRO a partir de septiembre del pasado ejercicio rebajó de los 500 a los 400 puntos el contrato, como puede verse en el gráfico, pero el efecto fue poco duradero. En cuanto se descontó que no habría más megacolocaciones del Banco Central Europeo (BCE), las coberturas se dispararon de nuevo hacia 500 puntos o por encima. Hasta que llegó el 23 de julio y las palabras salvadoras del presidente del BCE.
Los anuncios del BCE, sumados al visto bueno del Tribunal Constitucional alemán al rescate e incluso el QE3 estadounidense, llevaron al CDS a un mínimo de 342 puntos, no visto desde el verano del pasado año, conforme datos facilitados por Intermoney.
Una cifra que sostiene a los mercados. La subasta de deuda de ayer se resolvió bien y el Ibex aguanta por encima de 8.000 puntos. Desde Renta 4 indican que “será difícil ver fuertes correcciones mientras el mercado tenga constancia de que los bancos centrales actuarán”.
Sin embargo, esta tregua no es eterna. En Ahorro Corporación ponían ayer de manifiesto el estrechamiento de la prima de riesgo y el CDS, pero para que esta tónica continúe, “es necesario que, además de los avances en el ámbito institucional europeo, se siga avanzando en las reformas estructurales y en la consolidación fiscal por parte de los países periféricos.”
Sin duda, una gran piedra de toque será la presentación de los Prespuestos Generales del Estado (PGE) de 2013 y otra, la solicitud de rescate y el conocimiento de las condiciones impuestas. De momento, la prima de riesgo cerró ayer en los 424 puntos básicos, mientras el CDS lo hizo en 353.