La Comisión Nacional del Mercado de Valores ha requerido, por vez primera desde el año 2012, información adicional a Telefónica sobre sus cuentas anuales. En su requerimiento, el regulador del mercado español insiste en trasladar a la operadora española varias cuestiones relacionadas con la prevención de prácticas corruptas y las investigaciones que el grupo está llevando a cabo.
Telefónica explica en sus respuestas a la CNMV, en un documento fechado el jueves 20 de septiembre, que, tal y como indica en sus resultados anuales, "se están llevando investigaciones en varios países sobre posibles infracciones de las leyes contra la corrupción". En la actualidad, añade la compañía española, se sigue cooperando con las autoridades gubernamentales y "prosiguiendo con las investigaciones en marcha".
"Si bien el Grupo Telefónica cuenta con normativas internas y procedimientos establecidos para asegurar el cumplimiento de las leyes", señala la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete, "no puede garantizar que esta normativa y procedimientos sean suficientes", o que, añade, los directivos y empleados del grupo infrinjan la normativa establecida.
Telefónica no detalla en sus respuestas a la CNMV ningún caso concreto de corrupción que esté investigando
Telefónica admite que del incumplimiento de las leyes se derivaría un grave riesgo reputacional, sanciones financieras y finalización de contratos públicos. No obstante, la multinacional española no detalla en sus respuestas a la CNMV ningún caso concreto de corrupción que esté investigando ni menciona ningún mercado en particular. Fuentes del grupo apuntan que se trata de información que viene añadiendo desde hace varios ejercicios en sus cuentas anuales, y que no afecta a la situación financiera.
El grupo subraya en sus respuestas a la CNMV que cuenta con protocolos de actuación contra la corrupción y que también ha aprobado medidas preventivas. Telefónica indica que ha aprobado directrices en cuanto a la percepción de regalos, invitaciones o relaciones con autoridades públicas. La compañía apunta que se encuentra además aplicando nuevas medidas de control contra la corrupción y que cuenta con cursos de formación a empleados al respecto.
Telefónica asegura que en "los últimos años" ha mejorado e incrementado los controles de lucha contra la corrupción "y el soborno en una suerte de evolución natural".
El organismo presidido por Sebastián Albella también pregunta a la operadora española sobre las acciones legales emprendidas en Colombia por concesión y cancelación de licencias. Además requiere a Telefónica explicaciones sobre operaciones con derivados.
Los requerimientos de la CNMV a Telefónica se producen en un momento de cierta debilidad de la operadora en Bolsa. El valor del grupo acumula una caída en lo que va de año cercana al 14% y se sitúa en mínimos desde hace años, por debajo de los siete euros por acción.
La compañía ha recibido en las últimas semanas valoraciones negativas de algunos analistas, especialmente de JPMorgan, que ha reducido el precio mínimo en Bolsa de la compañía hasta los 6,2 euros por acción, mientras que Morgan Stanley lo ha elevado a los 9 euros por título. La crisis económica en Argentina también ha pasado factura al grupo, que planeaba sacar a Bolsa su división en el país. En la sesión del viernes el valor de Telefónica sube un 1%, alcanzando un valor de mercado de 36.000 millones de euros.