Las comercializadoras no convencionales de electricidad han ganado terreno frente a las grandes compañías eléctricas y pasaron a concentrar el 30% de la cuota de mercado en 2019, según señala la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) en un informe sobre el mercado minorista.
Pese a este incremento de la competencia, el análisis por segmentos de consumo revela que el segmento doméstico continúa presentando una alta concentración, con una cuota conjunta de los tres mayores grupos de comercialización (Endesa, Iberdrola y Naturgy) del 81%.
En su informe sobre el funcionamiento del mercado eléctrico en España en 2019, la CNMC constata además que el despliegue de contadores inteligentes para el consumidor doméstico, que miden el consumo horariamente, ha favorecido la aparición de ofertas con precios dinámicos.
De hecho, casi medio millón de clientes conectados en baja tensión eligieron una oferta con precios dinámicos, además de los casi 11 millones de consumidores acogidos al PVPC. Adicionalmente, 1,8 millones de clientes optaron por una oferta de tramo, es decir, un producto con precios variables por periodos.
Además, las ofertas verdes de origen renovable atrajeron a 3,8 millones de consumidores en 2019 frente a los 2,9 de 2018 y el autoconsumo procedente de instalaciones fotovoltaicas con compensación de la energía vertida a la red ha pasado de 5 MW a 68 MW.
Reforzar la protección al consumidor
La CNMC ha insistido en la necesidad de proteger al consumidor de electricidad y ha señalado que desde la prohibición de las visitas domiciliarias se ha incrementado el uso del canal telefónico, detectándose en ocasiones falta de transparencia, antes y durante el proceso de contratación.
Asimismo, ha denunciado que algunos comercializadores están aplicando importes por el alquiler del equipo de medida superiores a los facturados por el distribuidor y que ciertas empresas de servicios energéticos están cambiando la titularidad del punto de suministro a su nombre para modificar los parámetros del contrato sin requerir autorización expresa del consumidor.
Por otro lado, la CNMC ha advertido de que algunos comercializadores han penalizado a los consumidores por la pronta resolución del contrato, exigiéndoles la devolución de descuentos o el pago de costes asociados que exceden lo fijado, y han reducido a los clientes la potencia contratada sin que ello se vea reflejado en las facturas.
La CNMC ha propuesto la utilización de una metodología común por parte de las comercializadoras que ofrezcan ofertas dinámicas y les ha recomendado a todas las empresas del sector tener planes de acción específicos con el objetivo de mejorar la atención al cliente y disminuir el número de quejas y reclamaciones.