El comercio tiene la vista puesta en volver a abrir los establecimientos cuanto antes, pero, a dos semanas de que finalice el estado de alarma, pide al Gobierno un calendario con fechas claras para preparar las tiendas. En ese sentido, solicitan al Ejecutivo además que explique cuáles son las medidas de seguridad para evitar contagios que va a imponer para las aperturas, desde mascarillas hasta geles o mamparas.
Así las cosas, y aunque el Gobierno sí está contando con patronales y asociaciones para recibir sus sugerencias desde hace unos días, todos ellos denuncian que la comunicación no es fluida y que no conocen los planes del Ejecutivo sobre las fechas que manejan. En estos días, el ministerio de Industria, Comercio y Turismo está recibiendo los planes sugeridos por la patronal del textil, Acotex o de la Confederación Española de Comercio (CEC). Este mismo jueves, el Gobierno pidió además a los establecimientos hosteleros, agrupados más de 300.000 bajo Hostelería de España, que hiciera lo propio y preparara un documento con sus sugerencias y medidas propuestas.
No obstante, todas ellas trabajan sin una fecha en el horizonte que haya sido comunicada de manera oficial; así, y aunque sobre todo el pequeño comercio se inclina por pensar que abrirá en la segunda quincena de mayo, desde el Gobierno no dan todavía señales de plazos a los operadores, algo que preocupa especialmente a los bares y restaurantes, que podrían ser los últimos en volver a abrir sus puertas.
"Si no conocemos qué fechas maneja el Ejecutivo ni qué requisitos va a poner para abrir, la incertidumbre es total sobre si tendremos los EPIs suficientes para que nuestras tiendas sean lugares seguros", explican fuentes del sector del comercio, que apuntan a que, además, precisan hacer números cuanto antes sobre el desembolso que supondrán estos equipos de protección. Así, grandes empresas como Inditex ya están dibujando sus propios planes y haciéndose con el material de protección necesario, a la espera de las indicaciones del Gobierno.
Locales pequeños, primero
Lo que dan por descontando en el sector es que la apertura de los comercios se hará de forma escalonada, aunque queda determinar cómo. "Intuimos que habrá diferencias sobre territorios, pero también sobre el tamaño de los locales o tipos de negocio", cuentan las mismas fuentes.
En este sentido, la CEC ya ha solicitado al Ejecutivo que los locales que abran primero sean los de menos de 400 metros cuadrados, como han hecho otros países como Alemania o Austria, y que las grandes superficies abran en una segunda fase. "Podríamos empezar a abrir con horarios reducidos, que fueran ampliándose poco a poco", cuentan desde la confederación. Las propuestas de los comerciantes pasan, además, por una limitación de aforo.
Este mismo viernes, autonomías como País Vasco o Galicia mostraban también que tienen sus propios planes, que, no obstante, deben tener la luz verde del Gobierno central. En este sentido, el lehendakari Iñigo Urkullu se inclina por abrir a partir de la segunda quincena de mayo los locales del pequeño comercio, peluquerías incluidas, pero no los bares ni restaurantes; en Galicia, Alberto Nuñez Feijóo apuesta por estudiar la apertura de comercio con garantías y seguridad, con limitaciones de aforo e, incluso, con cita previa.
Universo aparte son los locales de hostelería, que estudian cómo hacer posible una apertura segura. En este sentido, no está claro siquiera que la instalación de mamparas vaya a ser uno de los requisitos indispensables. De hecho, desde Hostelería de España ya han dejado claro su rechazo porque no se les ha trasladado aún que sea necesario desde el punto de vista sanitario.
"Si alguien quiere invertir y considera que es lo mejor para su negocio, perfecto, pero queremos que los hosteleros sepan a día de hoy las mamparas no son obligatorias para la vuelta a la actividad", explican desde la asociación. De hecho, su propuesta de protocolo incluye el control de temperatura a la entrada del establecimiento, el reajuste del aforo con una distancia mínima de separación entre mesas o la implantación de dispensadores de hidrogel.
Una vuelta a la normalidad de forma gradual que, a dos semanas del comienzo, no tiene todavía un plan específico. "Es necesario terminar con esta incertidumbre", insisten los comerciantes.