Desde principios del mes de abril, las patronales de los sectores más tradicionales de la economía
española, como el comercio al por menor y hostelería, empezaron a hablar de un cambio radical en relación
con la dinámica de los dos ejercicios anteriores. La ausencia de medidas restrictivas en el aforo de los
establecimientos, los horarios de cierre y también en los desplazamientos cambiaron la visión fatalista que
se había instalado desde la primavera de 2020. Se empezó a hablar de ocupación completa, una expresión
abandonada en marzo de 2020, en hoteles, establecimientos rurales, restaurantes, bares, cafeterías… en
buena parte de la geografía española.
Los datos del mercado laboral han ido abonando el optimismo mes tras mes. En el segundo trimestre de
2019, había en España, según la Encuesta de Población Activa del INE, 19.804.00 personas ocupadas.
Tres años más tarde, se rozan los 20,5 millones, según la misma fuente. La tasa de paro era entonces del
14,02% (llegó a alcanzar el 16,26% en el tercer trimestre de 2020), y en junio de este año se sitúa en el
12,84%.
Todo convergía hacia la conclusión de que el camino que le quedaba por recorrer a la economía española
era hacia arriba. Incluso el dato de crecimiento del PIB en el segundo trimestre, un 1,1% en tasa
intertrimestral y un 6,3% en comparación interanual, gracias al tirón del consumo de los hogares,
presagiaban un futuro de escaparate para los sectores más duramente afectados por la pandemia.
Pero no ha sido así. Los datos pormenorizados de la EPA del segundo trimestre indican que el comercio al
por menor y la hostelería siguen lejos de alcanzar la ocupación de hace tres años. Tan lejos como que hay
cerca de 150.000 personas menos trabajando en estas actividades que en junio de 2019, aunque las
aglomeraciones en grandes centros comerciales, restaurantes y terrazas que se están produciendo desde la
primavera hayan creado un espejismo.
Al finalizar la primera mitad del año, el número de ocupados en España ascendía a 20,5 millones de
personas. Un total de 2,92 millones estaban parados. Según los datos de la EPA, 1.808.400 personas
estaban en el “comercio al por menor, menos vehículos de motor y motocicletas”, como indica la
clasificación de actividades económicas. Son el 8,8% del total de ocupados. En el sector de la hostelería,
se contabilizaban 1.709.800 ocupados, el 8,4% del total. Son 110.220 (-5,73%) y 37.300 menos (-2,13%),
respectivamente, que las que figuraban en la EPA del segundo trimestre de 2019.
En el caso del comercio al por menor, los datos de junio de este año son los peores desde la crisis
financiera internacional de 2008. Nunca, en este periodo, el porcentaje de ocupados en este sector ha
bajado del 9%. Incluso en 2013 y 2014, unos de los más trágicos años para el empleo que se recuerdan, la
ocupación en esta actividad llegó a situarse en el 10,8%.
En el caso particular de la hostelería, tanto en el segundo trimestre de 2019, como de 2018 se registraron
mayor número de ocupados. En 2016 y 2018 el porcentaje sobre el total llegó a superar el 9%.
Lo peor de todo es que estos números se han dado cuando el sector servicios mantiene su hegemonía en
su contribución al Producto Interior Bruto. Según el INE, el PIB a precios de mercado del segundo
trimestre alcanzó los 220.408 millones de euros, casi 6.000 millones más que en el mismo periodo de 2019. Representa el 67,24% de todo el PIB español (327.758 millones), es decir, más de las dos terceras
partes de lo que España es capaz de producir o prestar en un año. El porcentaje es muy similar al de 2018.
Dentro del sector servicios, y de acuerdo con la clasificación estadística que proporciona el INE, el
apartado “comercio, transportes y hostelería” supone 70.665 millones de euros, el 32,06% del todos los
servicios. En junio de 2019, estas actividades ocupaban al 39,1%. En los peores años de la pandemia, la
aportación bajó a 38.252 millones en la primera mitad de 2020 (22,2% del total del sector servicios) y a
55.984 millones (el 27,52%) en el mismo periodo de 2021.
El descenso de la ocupación no ha afectado por igual a hombres y mujeres. El número de ocupadas es
muy similar en junio de 2019 y junio de 2022 en el comercio al por menor. La caída se ha circunscrito a
los hombres. En términos absolutos hay 50.000 varones ocupados menos. La diferencia respecto a los
110.200 totales que hemos señalado anteriormente se debe a que en 2019 había más gente ocupada en
España en este sector que en la actualidad.
Por lo que se refiere a la hostelería, el número de ocupados varones ha permanecido invariado en estos
tres últimos años en 795.300. La crisis se ha centrado en este caso en las mujeres: en la actualidad, hay
37.300 mujeres menos ocupadas en el sector.