Economía

Convertir las compras en ahorro, una tendencia al alza que pone en jaque a los planes de pensiones tradicionales

Pensumo y VidAhorro son dos de las aplicaciones que están ganando terreno para utilizar el consumo como vía de ahorro de cara a la jubilación. Trabajan con empresas como Amazon, La Casa del Libro, Desigual y AliExpress y facilitan al consumidor el ahorro para el futuro sin tener que abrirse un plan de pensiones y sin hacer aportaciones cada mes

  • Un mujer sostiene una moneda de dos euros

Los planes de pensiones no atraviesan su mejor momento. Siempre se ha dicho que es un tipo de instrumento que no ha calado mucho en España y lo cierto es que ahora lo van a tener mucho más difícil por la proliferación de aplicaciones y plataformas que ofrecen a los consumidores formas diferentes de ahorrar para la jubilación. Es lo que hacen, por ejemplo, Pensumo y Vidahorro, dos aplicaciones que permiten a los consumidores destinar un porcentaje de sus compras diarias a la jubilación.

Estas aplicaciones nacen con un objetivo claro: hacer que el ahorro para la jubilación salga del consumo y no de la renta, ya que muchos españoles tienen dificultades para ahorrar en estos tiempos. Trabajan con firmas como Amazon, La Casa del Libro, Desigual y Ali Express y dedican un porcentaje de las compras al plan de pensiones. Solo hay que escanear el ticket en la aplicación en el momento de la compra o pasar el móvil por la TPV y automáticamente un porcentaje de esa compra va al ahorro personal. 

¿Qué ventajas ofrecen estos productos y por qué pueden poner en jaque a los planes de pensiones tradicionales? Es sencillo, para empezar permiten a los consumidores tomar la decisión de empezar a ahorrar desde el sofá de su casa solo con descargar la aplicación. Además, les brindan la posibilidad de utilizar sus vías habituales de consumo para generar cierto ahorro, sin tener que destinar una parte importante de su salario cada mes.

Pensumo, la pionera

Pensumo fue la primera aplicación que nació para ofrecer a los consumidores "pensiones por consumo". La creó en Zaragoza en 2013 un antiguo trabajador de El Corte Inglés, José Luis Orós. Además de las marcas ya mencionadas, trabaja también con Media Markt, Disney Store, Fnac, Supredry, Viajes El Corte Inglés, Puma, Calcedonia, Converse, Swaroski, Maison du Monde, Ulabox y The Body Shop, entre otras.

De momento, utiliza una póliza colectiva de Allianz, que invierte el dinero del ahorrador en deuda pública. El dinero ahorrado se puede rescatar cada cinco años sin penalización y antes si se está dispuesto a asumir las pérdidas correspondientes. Se pueden hacer también aportaciones puntuales si se desea.

En cada compra, el usuario podrá recibir una cantidad del 3% del coste del producto que adquiera, aunque puede alcanzar incluso el 10%. Esta cuantía se destinará a un plan de ahorro. Y va más allá del mero consumo al premiar también a los consumidores por buenas prácticas como el reciclaje, uso de servicios públicos, consumo cultural o ahorro energético, entre otras. 

Foto de archivo de plásticos apilados en la planta de reciclaje del grupo ALBA en Berlín, Alemania.

La aplicación de AXA va acumulando en una cuenta ficticia el ahorro y cuando supera los 30 euros netos, se meten en el plan de pensiones

VidAhorro, de la aseguradora Axa, hace prácticamente lo mismo, pero centrada únicamente en el consumo. La plataforma cuenta con casi un centenar de establecimientos adheridos que comprenden desde tiendas físicas como El Corte Ingles FNAC a proveedores de hidrocarburos como CEPSA, plataformas de compra online como Amazon Just Eat, agencias de viajes como Booking, hoteles y demás.

El porcentaje de cada compra que se va a destinar al plan lo fija cada establecimiento, pero se estima que la bonificación media puede rondar entre el 5% y 5,5%. Los descuentos se van acumulando en una cuenta ficticia de la aplicación y cuando se superan los 30 euros netos (están sometidos a una tributación del 19%), se hace la aportación al plan de pensiones. También contempla la posibilidad de hacer aportaciones puntuales.

Lo que está claro es que la digitalización de la economía y la proliferación de este tipo de instrumentos de ahorro va a suponer un riesgo importante para el sector de los planes de pensiones tradicionales, que lleva ya siete años cayendo y que podría firmar el octavo en 2018. Además, no hay que olvidar que estos planes están en el ojo del huracán ahora que Unidos Podemos se ha convertido en el principal socio del Gobierno y quiere eliminar la desgravación de estos productos, su principal atractivo.

¿Es el momento de buscar un plan de pensiones mejor?:

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