De nuevo, a última hora y saltándose el guión. Se esperaba una bronca sonora por parte de las autoridades europeas. Pero la cosa no se ha quedado en mero rapapolvo: el Eurogrupo exigió ayer al Gobierno español un esfuerzo adicional: el déficit público no deberá sobrepasar el 5,3% este año.
La demanda de Bruselas de podar en medio punto porcentual el objetivo fijado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se traduce en alrededor 5.000 millones de euros más de esfuerzo para las arcas públicas. Lo que supone un recorte total de aproximadamente 35.000 millones, de los que el Ejecutivo ya ha recortado 12.000.
"El Eurogrupo considera que la corrección a tiempo del déficit excesivo debería asegurarse con esfuerzos adicionales adelantados del 0,5 % del PIB, más allá de lo que ya han anunciado las autoridades españolas", apuntaron los ministros de Finanzas de la eurozona en un comunicado.
El ministro de Economía y Competitividad, viajó ayer al corazón burocráta de la Unión Europea par defender y justificar el nuevo déficit del Gobierno. Un objetivo que Rajoy había suavizado desde el 4,4% establecido por el anterior Ejecutivo de Zapatero hasta el 5,8%. El baile de cifras de unos y otros se ha quedado a la mitad y ahora Bruselas pide un esfuerzo superior al de Rajoy con la mirada puesta en ell Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que fija el techo de déficit en el 3% en 2013.
Con todo, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, reconoció el "progreso sustancial" logrado hasta ahora con las reformas estructurales para fomentar el empleo y el crecimiento, pero destacó que necesitará ser completado con más esfuerzos en los mercados de productos y servicios. Asimismo, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, se mostró satisfecho con que España haya accedido a reconsiderar la meta del 5,8% y subrayó la importancia de que el país esté firmemente comprometido a cumplir con el 3 % del 2013.
