El avance de los datos de la deuda de las administraciones públicas en el primer trimestre del año ha superado todo lo imaginable, incluso para tiempos de pandemia. Lo que deben Estado, comunidades autónomas, corporaciones locales, Seguridad Social y organismos de la Administración Central es un 25,3% superior a la riqueza generada por España en un año: cerca de 1,4 billones de euros, 168.176 millones de euros más que hace solo 12 meses.
Buena parte de la cifra total, exactamente 288.710 millones de euros, el 20,7% del total, es deuda existente entre todos estos sectores, cifra que ha crecido un 8,6% en relación con el año anterior. Fundamentalmente son créditos concedidos por el Estado a la Seguridad Social y por ésta o el propio Estado a organismos como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
El Estado es el principal deudor, como es lógico, pero no el que más ha crecido en términos interanuales. Ese dudoso honor le corresponde a los organismos de la Administración Central, cuya deuda ha pasado de 25.210 millones de euros en marzo del pasado año a los 56.804 millones del cierre del primer trimestre. Se trata de un incremento del 125,3%, que ni siquiera se ha dado en la Seguridad Social, cuya deuda ha subido un 55,12% y supera ya los 85.355 millones.
Qué son los organismos públicos autónomos
Tal y como lo definen los Presupuestos Generales del Estado, “los organismos autónomos son entidades de derecho público, con personalidad jurídica propia, tesorería y patrimonio propios, y autonomía en su gestión que desarrollan actividades propias de la Administración Pública, tanto de fomento, prestacionales, de gestión de servicios públicos o de producción de bienes de interés público”. Son entidades que dependen de un departamento ministerial y con el Estado y la Seguridad Social forman los otros entes que se integran en el ámbito de los Presupuestos Generales del Estado.
Los Presupuestos para el año en curso incluyen 59 organismos autónomos, que cuentan para este año con una dotación de 47.966 millones de euros, un 16,4% más que en el ejercicio precedente. Los más importantes son el SEPE, el Fondo de Garantía Agraria, Muface, el Fondo de Garantía Salarial, BFA, FROB, el Fondo de Garantía de Depósitos, CSIC, CNMC, Consejo Económico y Social, AEMET o el Instituto Cervantes, entre otros.
Los últimos Presupuestos del Estado incluyen 59 organismos autónomos, que cuentan con una dotación de 47.966 millones, un 16,4% más que en 2019
En diciembre del pasado año, la Unión Europea obligó a incluirse la Sareb (34.182 millones de euros) al considerar que el aval del Estado para su deuda era razón suficiente para formar parte de la contabilidad según el procedimiento de déficit excesivo y no ser considerada como una entidad privada, aunque la mayoría de su capital lo sea.
Para encontrar una cifra similar de deuda en los organismos de la Administración central habría que remontar a enero de 2015. En noviembre de 2013 se alcanzó la cifra máxima en este apartado, con 170.749 millones de euros. Apenas tres años antes, en enero de 2011, la deuda apenas sumaba 8.729 millones de euros.
Préstamos al SEPE y la Seguridad Social
Los préstamos del Estado al SEPE y a la Seguridad Social son una práctica común en tiempos difíciles para la economía y el empleo. A finales del pasado año, el Gobierno aprobó un crédito de 2.300 millones de euros para el SEPE y otro de 6.000 millones para la Seguridad Social con el fin de hacer frente a los gastos extraordinarios derivados del incremento de las prestaciones contributivas por desempleo y del subsidio de las personas que finalizaron su contrato temporal durante el estado de alarma o la prolongación de la vigencia de los expedientes temporales de regulación de empleo (ERTE) por la pandemia.
Y es que desde hace diez años las cuentas no cuadran en la Seguridad Social. En 2011, entró en pérdidas por vez primera. Situación que se ha ido agravando con el paso del tiempo, hasta el extremo de acumular cerca de 131.000 millones de euros de déficits entre los años 2014 y 2020, según datos del Banco de España. En proporción al déficit (cerca de 30.000 millones en 2020) ha ido su endeudamiento, que durante la pandemia se ha incrementado en algo más de 30.300 millones.
En los Presupuestos para el presente ejercicio, el SEPE tiene una dotación de 31.632 millones de euros (las dos terceras partes de todos los organismos autónomos) una cantidad un 23% superior a la de 2020, con el fin de llevar adelante las políticas activas de empleo y la gestión del sistema de protección por desempleo. El hecho de que los beneficios de los ERTE se vayan a extender más allá del 31 de mayo tal y como ha solicitado la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, hace pensar que a finales de verano el Estado se vea en la necesidad de aprobar una inyección extra de liquidez en forma de nuevo préstamo.