Un simple vistazo a la evolución de los mapas de temperaturas desde mediados del siglo XIX hasta ahora basta para ilustrar los efectos del cambio climático y la proliferación de emisiones de gases contaminantes. De imágenes sin apenas manchas de colores a un planeta dominado por completo por los tonos rojizos que señalan aquellas zonas en las que los termómetros solo saben subir. Es una de esas instantáneas "que son como puñetazos", como aseguró el periodista y divulgador científico José Luis Gallego, que no dudó, sin embargo, en mostrarse esperanzado tanto por el paquete de medidas de la Unión Europea en favor de la economía circular como en la actitud de las empresas, con mención especial a las entidades financieras.
"Lo que ocurre es que el dinero se está haciendo ecologista", sentenció Gallego durante su intervención en la jornada sobre sostenibilidad organizada por Vozpópuli y patrocinada por Coca-Cola e Inditex. Fue justo antes de poner el ejemplo de la aseguradora AXA, que trazó un plan en 2016 para invertir 12.000 millones de euros en sostenibilidad hasta 2020 y a día de hoy ya supera los 20.000.
A ello también ha contribuido la Unión Europea con su paquete de medidas, que Gallego resumió en un mensaje: "Los activos de la naturaleza no son infinitos. El que piense en un crecimiento infinito de un planeta infinito, o está loco o es un acérrimo defensor de la economía lineal".
Un mensaje que cada vez más cala en las empresas, de las que Gallego destacó tres casos. Aquaservice, proveedor de agua envasada para hogares y empresas, cuenta con un sistema para dar su servicio que evita que los bidones se depositen en lugares inadecuados, toda vez que la compañía se encarga de recuperarlos cuando ya se han consumido. El material con el que están fabricados permite su reutilización, con lo que también se reduce la producción de este tipo de envases.
Con este sistema se evita la fabricación y el uso de 200 millones de botellas de litro y medio, así como el posible impacto de su residuo en el planeta, lo que equivale a la reducción directa de 60 toneladas anuales de plástico. Además, la distribución se realiza desde una red de multimanantiales que permiten una explotación sostenible de los acuíferos, a través de 40 centros logísticos de proximidad y con la mayor flota híbrida de camiones de bajo tonelaje de Europa (cada vehículo reduce las emisiones de CO2 que captarían 140 árboles).
Las entregas se realizan mediante rutas de alta eficiencia y bajas emisiones, que han permitido reducir las distancias un 40% en los últimos 3 años. Más del 30% de las entregas finales se realizan a pie, sin desplazamiento del vehículo, gracias a un innovador sistema de reparto a través de camión-almacén.
"Lo que contamina las aguas son recursos, que en su mayoría sólo utilizamos una vez"
"El problema es que la suciedad de los océanos no está provocada por arrojar residuos. Lo que contamina las aguas son recursos, que en su mayoría sólo utilizamos una vez. ¿Qué nos ha pasado?", se preguntó Gallego, alarmado por la existencia constatada de cinco islas de basura arrojada a mares y océanos, cuya extensión agregada es equivalente a la superficie de Europa y Oceanía.
Otro caso llamativo mencionado por Gallego es el de la compañía vasca Ternua, especializada en prendas de vestir para la escalada, fabrica sus productos a partir de las redes de pesca abandonadas en mares y océanos, donde causan estragos en la fauna marina. Una vez recuperadas y con un tratamiento adecuado, el nylon de las redes se convierte en un material muy resistente, de una calidad superior.
La empresa ofrece otros ejemplos de economía circular como el empleo que hace de posos de café para reducir el olor de los materiales o de las cáscaras de nuez que recoge de establecimientos de hostelería y que emplea en el tintado de las prendas.
El tercer ejemplo es el de Unilever, gigante mundial de productos de consumo, que se ha marcado como meta para los próximos cinco años que el 100% de sus envases sean reciclables.
Modos de economía circular que Gallego recomendó explicar de forma sencilla para que todo el mundo pueda entenderlo porque la sostenibilidad es una cuestión que afecta a todos. Y para ello también puso un ejemplo gráfico, en forma de una frase de su abuela María: "si quieres comer huevos todo el año, no pongas la gallina en la cazuela".