El coche eléctrico es un punto clave de los planes estratégicos de las principales energéticas de España. Iberdrola, Endesa o Repsol buscan liderar este sector de presente y futuro. Y EDP no quiere ser menos. Una batalla que Javier Martínez, director de movilidad sostenible de EDP España, considera que todavía tiene mucho recorrido en España con respecto a otros países europeos. Según sostiene, antes de 2025 será un sector que competirá de tú a a tú con el coche de combustión tradicional.
Pregunta: ¿Cómo está el coche eléctrico en España a agosto de 2021?
Javier Martínez: Hoy, podemos decir que el coche eléctrico en España es una realidad. Cada vez más conductores eligen pasarse a la movilidad sostenible y nuestro deber es ir mejorando y desarrollando una infraestructura de vehículo eléctrico acorde a las necesidades de los usuarios.
El Gobierno ha fijado el objetivo de disponer 100.000 puntos de recarga para el 2023. Se trata de meta ambiciosa, pero nosotros ya estamos trabajando en ampliar nuestra estructura de recarga para seguir contribuyendo al desarrollo del coche eléctrico, consiguiendo que haya más y más puntos. El acceso a puntos de recarga en la vía pública está creciendo a un ritmo constante.
En este sentido, EDP ha otorgado gran importancia a la movilidad eléctrica en su Plan estratégico para 2021-2025, en el que la inversión total será de más de 24.000 millones de euros.
P: ¿Hemos hecho los deberes con respecto a otros países?
J.M: Estamos viendo una evolución favorable de la movilidad eléctrica en nuestro país. Si bien la electrificación del parque móvil continúa avanzando, hay países europeos más adelantados que nosotros. Sin embargo, esto no significa que en España no se esté trabajando por impulsar la movilidad eléctrica, solamente el proceso está siendo algo más lento. Tenemos un ejemplo muy cercano en Portugal donde, gracias a una anticipación de las políticas de impulso al vehículo eléctrico, la penetración de estos coches en el mercado es altísima, siendo el cuarto país europeo en porcentaje de parque eléctrico sobre el total.
Para agilizar este cambio y promoverlo firmemente, tanto las empresas como la administración tenemos que actuar, acelerar la transición y fomentar la movilidad sostenible a través de la puesta en marcha de acciones que vayan directas a desarrollar la infraestructura de recarga, así como centrar los esfuerzos en explicar las ventajas de este tipo de vehículos sobre el resto. Ventajas tales como el ahorro, la comodidad de salir cada día del garaje con la batería llena o poder aparcar de manera gratuita en las calles de ciudades como Madrid o Barcelona.
P: ¿Qué retos tiene en el corto y medio plazo este sector?
J.M: Nuestra prioridad estratégica es aumentar la infraestructura de puntos de recarga públicos y privados. En España, la red de recarga está creciendo de forma continua, como aumenta también el parque de vehículos eléctricos. Desde EDP ya contamos con más de 300 puntos de recarga por todo el país y la posibilidad de operar en más de 800 puntos de recarga de otros operadores.
Las metas fijadas por el Gobierno, de disponer de 100.000 puntos de recarga en 2023, van ligadas al impulso del vehículo eléctrico por parte de todos los agentes implicados, desde la administración, con planes de incentivación, hasta el sector de la automoción y las empresas que estamos desarrollando la infraestructura de recarga. Este objetivo es una gran oportunidad que va a contribuir al desarrollo del coche eléctrico.
Por otro lado, tenemos que esforzarnos por explicar bien a las personas las ventajas y también desmitificar algunas barreras que son mucho menos grandes de lo que parecen o que ya no existen. A modo de ejemplo, hoy se puede perfectamente conducir un vehículo eléctrico por una ciudad como Madrid o en una comunidad autónoma como Asturias sin problemas para encontrar puntos de recarga. También se pueden hacer desplazamientos más largos con algo de planificación, disponiendo de carga rápida en la mayoría de las autopistas de la red principal. A modo de ejemplo, un vehículo puede hoy cruzar la cornisa cantábrica desde Francia a Galicia cargando en puntos de EDP sin mayor inconveniente.
P: ¿Está el consumidor preparado para este cambio de mentalidad?
J.M: Los vehículos eléctricos aún generan dudas entre muchas personas que no conocen bien cómo funcionan. Sin embargo, se está produciendo un cambio de mentalidad en los conductores, que se interesan cada vez más por una tecnología de movilidad más sostenible que la de combustión y que les permite desplazarse de la misma manera, solo que en vez de repostar combustible, recargan la batería de su vehículo.
Además, los conductores están siendo conscientes de los beneficios que tiene este tipo de movilidad para la sociedad y que les ayuda a interesarse, como una conducción con cero emisiones y la consiguiente mejora de la calidad del aire o una mayor eficiencia de los vehículos eléctricos y ahorros que alcanzan el 90% respecto al diésel.
P: ¿Va a provocar un terremoto en el sector del coche eléctrico en España los fondos europeos o se quedará en un impulso más?
J.M: La movilidad eléctrica continúa imparable a pesar de la pandemia. El Gobierno de España ha confirmado que inyectará 4.300 millones de euros para reconvertir la industria automovilística, tras aprobar su primer PERTE, y se estipula que en total serán 13.200 millones. Esto nos permitirá a los proveedores de energía y a los fabricantes de vehículos avanzar enormemente para que en unos años el coche eléctrico esté ya totalmente integrado en nuestras vidas.
2035 es la fecha tope que ha impuesto recientemente la Unión Europea para que desaparezcan los coches a gasolina, diésel y también híbridos. Ahora mismo, el vehículo eléctrico ha aumentado sus ventas respecto al año pasado en un 226%. Siempre que hay una ayuda o subvención estatal o autonómica se dinamiza el ánimo de compra del vehículo eléctrico por parte del consumidor.
La movilidad sostenible es uno de los ámbitos que más impactarán en el sector energético y será esencial para la descarbonización del transporte. Sin duda, los fondos europeos marcarán un antes y un después en la movilidad sostenible en nuestro país.
P: Con los precios de la electricidad actuales y la gasolina, ¿es más caro la recarga de un vehículo eléctrico o llenar un depósito con carburante?
J.M: El vehículo eléctrico es el único 0% emisiones. Su eficiencia es tres veces superior a la de los vehículos de combustión y en cuanto al precio de la recarga, el ahorro llega hasta el 90% en comparación con los coches tradicionales. Además, la recarga vinculada en casa permite tener un precio de la energía muy competitivo aprovechando el horario de noche que es cuando el vehículo está parado.
Por otro lado, creemos que en unos pocos años, sobre 2025, un coche eléctrico será igual de competitivo. Es un objetivo ambicioso, pero totalmente alcanzable. Para que esto suceda se tienen que hacer grandes inversiones de tiempo y dinero. Además, el sector de la automoción está sacando cada vez más vehículos eléctricos en sus gamas, por lo que esta competitividad está haciendo que el precio baje. En cuanto a nosotros, los proveedores de energía, estamos aumentando la infraestructura de estos puntos a gran velocidad para que lleguemos en este periodo al nivel en el que se encuentran ahora mismo los coches de gasolina y diésel.
P: ¿Cómo afecta esta crisis energética a EDP?
J.M: El Plan Estratégico de EDP para el periodo 2021-2025 prevé inversiones por valor de 24.000 millones de euros. Las inversiones se centrarán en tres ejes principales de acción: crecimiento en energías renovables, flexibilidad e inteligencia de las redes de distribución eléctrica y apuesta por diseñar y ofrecer las soluciones más innovadoras a sus clientes.
Hemos incrementado en el primer semestre del año el número de recargas para vehículos eléctricos un 51% respecto al año pasado. Estas recargas han permitido recorrer a los vehículos casi 1,4 millones de kilómetros, evitando la emisión de 138 toneladas de CO2. Actualmente, tenemos desplegados más de 300 puntos de recarga en espacios de acceso público y gestionamos 250 puntos de recarga privados.
P: ¿Qué plan tenéis para los próximos años?
J.M: Aumentar la infraestructura de puntos de recarga públicos en España es nuestro principal objetivo en movilidad eléctrica, junto con el de contribuir a la mejora del medioambiente.
El avance tiene que ser igualitario en todo el territorio y en EDP estamos especialmente comprometidos con la movilidad en las zonas más rurales lo que también es un incentivo para la reactivación del turismo rural. Para poner en marcha nuevos puntos, seguiremos trabajando en nuevos acuerdos con distintas entidades, como Ayuntamientos o estaciones de servicio y alianzas con empresas privadas.
En el ámbito privado, una de las iniciativas que va a ayudar a que se produzca una aceleración en este proceso es nuestro Plan MiVē, el primer servicio integral de movilidad eléctrica en España. La puesta en marcha de este plan supone mayores facilidades para los consumidores y una solución a la hora de contratar un punto de recarga en los hogares.
