La recuperación de la economía española es una realidad, pero no termina de encontrar la velocidad adecuada en los distintos parámetros que se utilizan para su medición. El volumen de empleo medido por el número trabajadores afiliados a la Seguridad Social ha recuperado los niveles previos a la declaración del estado de alarma, pero otros parámetros están todavía lejos de los registros de finales de 2019.

El Producto Interior Bruto (PIB), sin ir más lejos, no muestra la misma fortaleza del empleo, hasta el punto de que diversos organismos e instituciones, tanto nacionales como internacionales, entre ellos el Banco de España, han tenido que corregir a la baja en el mes de diciembre las estimaciones realizadas apenas tres meses antes por ser demasiado optimistas.

Uno de los indicadores que miden la confianza de una economía es el del número de empresas inscritas en la Seguridad Social. De acuerdo con los últimos datos publicados por el Ministerio de Trabajo, a finales del pasado mes de noviembre, en España había 1.322.440 sociedades registradas en la SS. Son 34.637 más que en el mismo mes de 2020, pero 10.543 menos que en el mismo periodo de 2019, cuando nada hacía sospechar la irrupción de una crisis sanitaria internacional que aún colea.

En el peor momento de la pandemia, el número de empresas registradas en la Seguridad Social llegó a disminuir en más de 107.000. Mientras en diciembre de 2019 se contabilizaron 1.340.415 sociedades, en abril de 2020, un mes después de la declaración del estado de alarma por el Congreso de los Diputados, se había reducido a 1.233.187. Se ha recuperado buena parte del tejido empresarial perdido durante la Covid 19, pero todavía se está lejos del número de empresas de 2018 (el más alto de los últimos cinco años).

Mientras el empleo ha acumulado en diciembre pasado diez meses consecutivos de crecimiento ininterrumpido, el número de empresas no termina de encontrar la senda correcta. A lo largo del pasado año registró descensos durante los tres primeros meses, para, posteriormente, encadenar cuatro meses de aumento, que se truncaron de nuevo en agosto con el cierre de 16.000 sociedades. Las fechas de los descensos coinciden justamente con el aumento del número de contagios durante las anteriores olas.

La hostelería y el comercio han sido los sectores más sacudidos por la pandemia. Cerca de 12.000 empresas han desaparecido solo en estas dos actividades, unas de las más afectadas por las restricciones de movimientos de los ciudadanos, las limitaciones de cifras de aforo y horarios o el cierre obligatorio de los establecimientos no considerados esenciales durante las primeras semanas de la Covid 19.

Canarias, Cataluña, Castilla y León, Galicia, Comunidad Valenciana y País Vasco han sido las regiones en las que más empresas han desaparecido. Por tamaño, las más perjudicadas han sido las que menos trabajadores tenían en nómina, las más pequeñas, especialmente las de entre uno y nueve. El número de empresas de entre 250 y 499 trabajadores ha permanecido prácticamente inalterado en os dos últimos ejercicios y hay 72 sociedades más por encima de los 500 empleados.

Además de las actividades más directamente relacionadas con el sector servicios, como la hostelería o el comercio, la pandemia ha afectado con fuerza a la industria manufacturera (hay 2.500 empresas menos) y a las empresas vinculadas a la prestación de mano de obra para los trabajos en el hogar.

En el otro extremo de la balanza hay que destacar el cambio de rumbo de la construcción, sector que viene a representar el 5% del PIB, y que ha visto como se incorporaban en estos dos últimos años más de 4.500 nuevas empresas a los registros de la Seguridad Social. También es destacable el aumento registrado en la agricultura, la ganadería y la pesca, con 3.783 nuevas sociedades, o el de sector “información y comunicaciones” (+1.374 empresas).

Únicamente hay cuatro comunidades autónomas que parecen haber dado la vuelta a la situación en noviembre pasado. Son Andalucia, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia. En todas ellas hay más empresas que en noviembre de 2019. En concreto, 2.849 más. Destacan sobremanera los datos de Andalucía, una de las regiones más dependientes del turismo, que cuenta hoy con 2.193 sociedades registradas más.

Canarias lidera la caída del número de empresas en activo. Ha perdido 2.107 en estos dos últimos años, lo que significa todavía una reducción del 3,4% en relación con la cifra total de noviembre de 2019. Le siguen Cataluña (-2.053), Castilla y León (-1.503), Galicia (-1.152), Comunidad Valenciana (-1.120) y País Vasco (-1.017). Madrid ha sido una de las zonas que mejor ha capeado el temporal durante la crisis sanitaria. Apenas hay 314 empresas menos, una cifra casi insignificante entre las casi 190.000 que estaban operativas en noviembre pasado.