El operador de telecomunicaciones Euskaltel, que se encuentra en pleno proceso de venta, tendrá que pagar a Orange 222 millones de euros, según ha ratificado hoy el pleno del Tribunal Superior de Justiticia del País Vasco (TSJPV), que ha decidido a su vez dar validez al laudo suizo de 2011 (el exequátur o reconocimiento en un país de las sentencias dictadas por tribunales de otro Estado), por supuestos perjuicios tras la ruptura de la alianza que el operador vasco mantenía con Orange hasta 2006.

El accionistas principal del operador Kutxabank ha indicado que la resolución del TSJPV no afecta a su estrategia en el operador. La compañía vasca de telecomunicaciones ha afirmado que la multa es fruto de una "injusticia histórica" y ha comunicado que va a continuar normalmente con su actividad y con sus planes estratégicos de inversión, crecimiento y "creación de riqueza para el país". Además, estudiará todas las posibilidades de recurso o impugnación que puedan existir en Derecho, una vez conocido y analizado el contenido de la Resolución dictada en mayoría por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que da da validez al laudo suizo que condenó a Euskaltel a 222 millones por supuestos perjuicios tras la ruptura de la alianza que el operador vasco mantenía con Orange hasta 2006.

El laudo condenó a Euskaltel a indemnizar a France Telecom con 221,9 millones de euros por considerar que la compañía vasca supuestamente infringió las cláusulas de no competencia mencionadas en el acuerdo de compraventa de acciones de AUNA por parte de France Telecom, cuando el citado acuerdo, según el operador vasco, "excluye expresamente a esos efectos las actividades de telecomunicaciones móviles 'actuales y futuras' de Euskaltel, por lo que la compañía vasca no incumplió las cláusulas de no competencia, ya que estaba expresamente excluida en el acuerdo".

Según Euskaltel, France Telecom acusó al operador vasco de "hurtar y apropiarse unos 300.000 clientes, obstaculizando sus actividades en el País Vasco", en referencia a los 230.000 usuarios que decidieron "libre y voluntariamente" continuar siendo clientes de Euskaltel, mediante procedimiento de portabilidad habilitado por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones para garantizar la libre decisión de los clientes, rechazando incorporarse a Orange.

Euskaltel ha lamentado que el TSJPV se haya limitado con su Resolución a asumir este laudo, a pesar del contenido del voto particular del árbitro español, en un proceso "de esta relevancia, con los intereses y perjuicios que estaban en juego".

El auto dictado por el tribunal vasco otorga el exequátur al laudo arbitral e impone a Euskaltel el pago de las costas del procedimiento. En la sesión, se ha anunciado la formulación de un voto particular.