En el peor momento de su historia, en preconcurso de acreedores, negociando con la banca un acuerdo que permita evitar el que sería la mayor quiebra empresarial en la historia española, Abengoa se ha visto salpicada por el caso Acuamed.
El contrato de la edificación de la planta de desalinización en el Bajo Almanzora, construida por FCC y Befesa (Abengoa), es uno de los investigados por la Guardia Civil en la conocida como Operación Frontino, que permitió el lunes destapar una trama que presuntamente amañaba adjudicaciones de la empresa estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed), dependiente del Ministerio de Agricultura, y que ha supuesto la detención de trece personas. Las investigaciones se centran en media docena de concursos públicos.
Abengoa asegura que no ha recibido ningún requerimiento relacionado con el caso Acuamed
La obra de la planta de desalinización de Almería es el tercer contrato de mayor importe investigado, por valor de 77,6 millones, por detrás de la construcción de una planta desaladora para garantizar los regadíos del trasvase Tajo-Segura en la localidad alicantina de Torrevieja (271,2 millones de euros), y el contrato de la primera fase del proyecto de eliminación de la contaminación química en el embalse tarraconense de Flix, valorado en 194 millones de euros. Fuentes de Abengoa aseguraron el martes que no han recibido ningún requerimiento relacionado con esta investigación.
FCC y Befesa, entonces filial de Abengoa, se hicieron con el contrato de obra de la planta de Bajo Almanzora en 2006. La planta fue inaugurada en septiembre de 2011 y el contrato contemplaba un periodo de mantenimiento de 15 años. "La desaladora del Bajo Almanzora forma parte de la Red de Infraestructuras del Levante, junto con la desaladora de Carboneras, también construida por Abengoa en 2005, el trasvase Negratín-Almanzora, donde Abengoa construyó la impulsión en 2004, y una serie de grandes canalizaciones de distribución", informó entonces la compañía sevillana.
La multinacional energética explicó en 2011 que la planta tiene capacidad para producir hasta 60.000 metros cúbicos de agua al día "con la finalidad de satisfacer la creciente demanda de recursos hídricos de la agricultura y de las localidades costeras de esta zona del levante almeriense". El grupo señalaba que con ella se beneficiarían 140.000 personas de los municipios de Almería.
Abengoa vendió Befesa en 2013 a los fondos de inversión Triton, sociedad creada a finales de los años noventa que invierte en empresas europeas de tamaño medio asesorados por equipos ubicados en Alemania, Suecia, Reino Unido, Luxemburgo y Jersey. Según explicó el martes un portavoz de Befesa, en la adquisición de la filial de Abengoa en 2013 quedó fuera del acuerdo el negocio del agua. La operación, valorada en 1.075 millones, reportó a la compañía española 630 millones de euros. "Esta transacción supone un nuevo paso en la estrategia de Abengoa de centrarse en el núcleo estratégico de su actividad, que incluye la ingeniería, desarrollo y operación de plantas termosolares, plantas desaladoras de agua, líneas de transmisión y plantas de producción de biocombustibles", comunicó entonces Abengoa.