Las últimas desinversiones de activos por parte de ACS han sumado más de 7.000 millones de euros pero el grupo que preside Florentino Pérez continúa precisando liquidez. Con el fin de obtenerla, la compañía ha puesto a la venta la sede de su filial Dragados, cabecera de su unidad de construcción, que estrenó hace algo menos de cuatro años.
La intención de ACS es venderla aunque no dejar de utilizarla, es decir, hacer una operación de sale & leaseback para obtener liquidez por el inmueble y, al mismo tiempo, quedarse como alquilado con lo que no tendrá que buscar una nueva ubicación. Dragados trasladó su sede a un edificio de nueva construcción situado en el barrio de Las Tablas, en la zona norte de Madrid.
De este modo, la compañía sigue los pasos de algunos de sus competidores, entre los que se encuentra Ferrovial, que vendió su sede central, situada en la madrileña calle de Príncipe de Vergara, por 40 millones de euros y, al mismo tiempo, firmó un contrato de alquiler con el nuevo propietario por 12 años, prorrogables por periodos de cinco. La operación se llevó a cabo a finales de 2009, precisamente cuando Dragados llevaba a cabo su traslado a Las Tablas.
Fuentes del sector han señalado a Vozpópuli que varios interesados han desfilado ya por el inmueble. Entre ellos se encuentran varios fondos de inversión especializados en el sector inmobiliario e interesados por el mercado español y también compañías aseguradoras, entre ellas la italiana Generali.
Oleada de desinversiones
A finales de 2011, FCC procedió a la venta de Torre Picasso, donde se encontraban sus oficinas centrales en Madrid. Precisamente, la compañía de construcción y servicios se ha trasladado recientemente a Las Tablas, a escasos metros del edificio que ACS ha puesto en el mercado.
En los últimos meses, ACS se ha deshecho de sus participaciones en la eléctrica Iberdrola y también en la concesionaria de infraestructuras Abertis, además de en algunos activos de energías renovables con el fin de recortar su elevada endeudamiento y, además, obtener liquidez. Con este mismo fin, el grupo constructor vendió la práctica totalidad de su autocartera por la que obtuvo unos 360 millones de euros.
La compañía también ha realizado movimientos de compra-venta de acciones con títulos de su participada alemana Hochtief, algunos de cuyos activos también están siendo objeto de venta, una estrategia que ha provocado ya varias dimisiones en la alta dirección de la constructora germana.
