Los focos de los grandes grupos españoles de construcción e infraestructuras viran hacia Oriente, tanto al Medio como al Lejano. Los planes ferroviarios de países como Qatar y Filipinas, que preparan ya las correspondientes licitaciones, han despertado el interés de los gigantes mundiales del sector. En juego, contratos valorados en aproximadamente 10.000 millones de euros.
Ambos programas están enfocados a desarrollar líneas de larga distancia en estos países. El filipino es el que presenta un grado de avance más adelantado. Consiste principalmente en el estudio, diseño y construcción de una línea de aproximadamente 475 kilómetros entre la capital, Manila, situada en la parte de central de la principal isla del archipiélago, y Legazpi, en el sur. El plan ferroviario de larga distancia de Filipinas también incluye conexiones con esta línea para permitir su acceso desde las localidades próximas a las dos grandes ciudades que unirá, lo que supondrá la construcción de algo más de 200 kilómetros adicionales. El contrato también incluye la operativa de la línea durante 30 años.
El filipino es uno de los numerosos gobiernos que ha contado con el asesoramiento de España para confeccionar un plan de desarrollo de sus líneas férreas
El proyecto se realizará mediante la modalidad de contrato público-privado y está valorado en cerca de 4.000 millones de euros. Más de una veintena de grandes grupos constructores de todo el mundo han recogido el guante lanzado por el Gobierno filipino para desarrollar el proyecto. Entre ellos se encuentran OHL, Acciona e Isolux-Corsán, que forman parte del conjunto de empresas precalificadas para las primeras licitaciones. El filipino es uno de los numerosos gobiernos que ha contado con el asesoramiento de España para confeccionar un plan de desarrollo de sus líneas férreas.
Qatar, en cuatro fases
Mucho más ambicioso es el plan de ferrocarril de larga distancia de Qatar, aunque se encuentra en una fase de desarrollo menos avanzada. El programa ferroviario del país ya se ha iniciado en realidad, con el proyecto del metro de Doha, del que ya se han adjudicado contratos empresas españolas como OHL y ACS. Este programa se completará con las cuatro fases del plan de larga distancia y el proyecto de metro ligero de Lusail, otra de las principales ciudades del pequeño país de Oriente Medio.
Las licitaciones que se iniciarán en los próximos meses en Qatar pondrán en juego más de 6.000 millones de euros en contratos
Las cuatro fases para desarrollar la red de larga distancia en el país incluyen la construcción de dos líneas, con un total de 500 kilómetros entre ambas. A lo largo del recorrido se construirán 11 estaciones y 7 nodos destinados al transporte logístico. Las líneas contarán con más de 125 puentes para salvar dificultades orográficas. Las licitaciones que se iniciarán en los próximos meses pondrán en juego más de 6.000 millones de euros en contratos. Entre las compañías españolas con el foco puesto en el mercado de Qatar destaca ACS, sobre todo por la amplia presencia en la región de su filial alemana Hochtief. Se prevé que la primera fase esté lista para el año 2018.
Más de 20.000 millones en seis meses
En los últimos años, las compañías españolas han obtenido contratos en el exterior, tanto de obras como de concesiones de infraestructuras, por un valor superior a los 40.000 millones de euros. Y no parece que 2015 vaya a ser una excepción, toda vez que en la primera mitad del ejercicio, el volumen de contratos logrados en el exterior por compañías españolas ha superado los 20.000 millones de euros.
Los planes de Qatar y Filipinas se encuentran entre los más atractivos del sector ferroviario junto con el desarrollo de líneas de alta velocidad. En este último capítulo destaca la segunda línea de AVE en Reino Unido, para la que varias compañías españolas han confeccionado diferentes consorcios con el fin de tratar de lograr alguno de los suculentos contratos en juego. También destaca el desarrollo de la red de alta velocidad en EEUU, un mercado en el que ACS ya ha logrado la licitación de un tramo por unos 1.000 millones de euros.
