ACS registró una pérdida neta de 1.926 millones de euros en 2012, frente a las gananias de 962 millones del ejercicio anterior. Esta diferencia se debe a diversos factores extraordinarios relativos a su inversión en Iberdrola y a las provisiones sobre activos y gastos derivados de su reestructuración financiera.
Según ha informado este jueves el grupo que preside Florentino Pérez, durante el último ejercicio la compañía vendió el 12% del capital de Iberdrola, una desinversión que generó unas pérdidas netas de 1.312 millones de euros. A esta cantidad se suman unas pérdidas de 1.308 millones de euros como consecuencia de los test de deterioro sobre las acciones de Iberdrola y los ajustes de valor a precios de mercado de los derivados sobre la eléctrica.
A cierre de 2012, la deuda neta del grupo constructor descendió hasta los 4.952 millones de euros, un 46,9%. De esta cantidad, 1.164 millones corresponden a su participada alemana Hochtief, mientras que los 3.788 millones restantes corresponden a préstamos sindicados y bilaterales.