Los aeropuertos españoles batirán un nuevo récord histórico de afluencia este año. Las previsiones de AENA pasan por un incremento en el entorno del 5,5% en relación la cifra de casi 250 millones de pasajeros registrada en 2017. La creciente evolución de esta magnitud será tenida en cuenta en el plan estratégico la compañía ultima y que será aprobado probablemente antes del verano.
En un encuentro con los medios de comunicación tras la junta general de accionistas de la compañía, su presidente, Jaime García-Legaz, aseguró que las cifras globales del año serán algo más moderadas que las registradas en el primer trimestre, en el que el aumento del número de pasajeros se ha situado en entornos próximos al 10%.
"Consideramos que el 5,5% es una cifra positiva, especialmente si se tiene en cuenta que venimos de récords históricos", apuntó el ejecutivo. De este modo, AENA cerrará el año con una cifra de pasajeros próxima a los 265 millones de pasajeros, sensiblemente por encima de los 250 millones previstos por el DORA para el horizonte de 2021.
Además, García-Legaz aseguró que la compañía no tiene previsto modificar los procedimientos para la contratación de servicios, pese al rechazo que ha generado en algunos de ellos, en especial las compañías de seguridad ante el macrocontrato licitado por AENA. "Los procesos funcionan bien y cambiar lo que funciona no tiene ningún sentido", apuntó García-Legaz, que además recordó que algunas de las empresas que han mostrado su disconformidad con las condiciones del contrato han presentado ofertas por algunos lotes.
Política estable de dividendos
El presidente del gestor aeroportuario ha sido tajante a la hora de recalcar que el incremento de la calidad de los servicios para los pasajeros no es una cuestión debatible, en relación con el incremento de las dotaciones de los contratos, caballo de batalla con las grandes empresas de seguridad.
García-Legaz también recordó que la subida del dividendo con cargo a las cuentas de 2017 (con una subida del pay-out del 50% al 80%) es tan sólo aplicable a este año y no tiene por qué repetirse en próximos ejercicios. A este respecto, el presidente de AENA precisó que el consejo de administración estudiará fijar una política de dividendos para los próximos años aunque aún no hay una decisión firme tomada al respecto.
El consejo está actualmente centrado en sacar adelante el nuevo plan estratégico de la compañía, que se extenderá hasta 2021. Un documento que García-Legaz estima que estará listo aproximadamente en dos meses y que determinará cuestiones tan relevantes como la expansión internacional de la empresa.
El Estado mantendrá la mayoría
El presidente de AENA indicó igualmente que los planes inmobiliarios en el entorno de los aeropuertos de Barajas y El Prat no contemplan en ningún caso la veta de suelo propiedad de la compañía. "Pretendemos desarrollar lo que se conoce como una ciudad aeroportuaria, con hoteles, oficinas, clusters para el sector, Pero para eso no es necesario desprenderse de suelo".
Asimismo, volvió a descartar que el Estado vaya a vender otro porcentaje de su participación en la compañía, que se eleva al 51%. Durante su discurso en la junta, García-Legaz señaló que este hecho "no es ningún impedimento para que AENA siga creciendo y mejorando sus cifras de tráfico y resultados económicos". Un mensaje dirigido al segundo accionista de la empresa, el fondo británico TCI, cuya postura es favorable a que AENA deje de tener mayoría de participación pública, un aspecto que considera perjudicial para el desarrollo del negocio.
García-Legaz vivió su primera junta como presidente de AENA en un ambiente de lo más plácido, hasta el punto de que ni siquiera hubo participación en el turno de intervenciones para los accionistas.