La competencia en el mundo de los asistentes es un hecho. Amazon tiene a Alexa, Apple a Siri y Microsoft a Cortana. La rivalidad está servida. Básicamente estamos hablando de programas basados en Inteligencia Artificial insertados en ordenadores, tablets, teléfonos o gadgets con los que podemos hablar y ordenarles acciones: que llamen un Cabify, que nos lean las noticias más importantes del día, que pongan música, que nos den la predicción meteorológica...
El objetivo llegados a este punto no es tanto, que también, que los dispositivos comprendan cualquier idioma y acento, sino lo que puedan hacer cosas que hagan al usuario la vida más fácil.
En este sentido Amazon ha incorporado una nueva tecnología a través de la cual permitirá a los usuarios de Alexa buscar y encontrar un objeto perdido. ¿Cómo? Así:
-Alexa, ¿puedes encontrar mi teléfono?
Tan simple -y complejo- como eso. La tecnología que está detrás la pone la compañía TrackR, que anunció recientemente una segunda ronda de financiación de 50 millones de dólares que fue secundada, también por segunda vez, por Amazon.
La ronda, dirigida por Revolution Growth y Brad Feld de Foundry Group, se han unido también otros inversores anteriores como DoCoMo Capital, The Glenmede Trust o Bespoke Strategies. Esta inyección de capital servirá de impulso para que la compañía siga creando soluciones de seguimiento de objetos perdidos.
"Esta es la segunda inversión que realizamos en TrackR. Nos va a permitir trabajar sobre su visión de la intersección de su sistema de rastreo y Alexa", dice Paul Bernard, de Alexa Fund. Alexa Fund, organización propiedad de Amazon, posee 100 millones de dólares en fondos de capital riesgo destinados a impulsar la innovación tecnológica en el apartado de voz, con el fin de que Alexa pueda ofrecer un mejor servicio.
Echo Show: voz... e imágenes
Amazon Echo, el altavoz que cuenta con Alexa integrado, cuenta ahora con un hermano pequeño llamado Echo Show.
En este caso se trata de un dispositivo que añade a todas las posibilidades de Echo, que básicamente es un altavoz con Inteligencia Artificial, una pantalla.
La diferencia, a priori, parece estar en que las respuestas a las cuestiones formuladas por el usuario se muestran en pantalla, además de a través de los altavoces.
Cuando un usuario, por ejemplo, solicita la reproducción de una canción, ésta no sólo se escucha, sino que también se podrá ver su vídeo musical.
Si pide que se le informe sobre la predicción meteorológica, se le explicará de viva voz, pero también a través de imágenes.