Dos de las españolas más poderosas y con más dinero, Ana Botín y Sol Daurella, son también dos de las principales ejecutivas de la mayor compañía del mundo de refrescos. Ambas comparten puesto en el consejo del primer banco español, Santander, y sus decisiones tendrán impacto en el negocio mundial de Coca-Cola.
La multinacional estadounidense nombró consejera a Ana Botín hace ahora dos años, cuando la ejecutiva española era consejera delegada de Santander UK. "Ana aporta una perspectiva internacional y un alto nivel de experiencia a la compañía", aseguró el presidente y consejero delegado de Coca-Cola, Muhtar Kent, en un comunicado. La experiencia el conocimiento de Botín "tendrán un valor incalculable", añadió.
Ana Botín recibió el pasado año 251.562 dólares como consejera de Coca-Cola
Ana Botín, 54 años, comparte puesto en el consejo de Coca-Cola con otros ilustres representantes de compañías con presencia mundial, cuyos conocimientos en la empresa, las finanzas, internet... son de utilidad para el negocio del grupo estadounidense. Como Herbert Allen, presidente de Allen & Company, una sociedad de inversión que ha participado en las mayores salidas a Bolsa de compañías de la última década, con una fortuna valorada por Forbes en 1.460 millones de dólares; Marc Bolland, primer ejecutivo de Marks & Spencer; Howard G. Buffett, hijo de Warren Buffet, presidente de Buffett Farms; o Barry Diller, presidente de IAC, una empresa que gestiona páginas de internet y que emplea a 5.000 personas, entre otros.
De acuerdo a comunicados enviados por Coca-Cola a la SEC, Ana Botin cobró el pasado año 251.562 dólares por su labor. De esa cantidad 50.000 dólares fueron pago en metálico y el resto en acciones. Botín forma parte de la Comisión de gobierno corporativo de Coca-Cola, responsable de designar a candidatos para incorporarse al consejo y evalúa la revisión de normas de conducta.
El grupo estadounidense destaca de Botín su elevado conocimiento del mundo financiero, recordando que trabajó en JPMorgan, en Nueva York, entre 1981 y 1988, que luego pasó a Santander encargándose del negocio en Latinoamérica del banco español, que presidió Banesto, y que fue consejera delegada de Santander UK entre 2010 y septiembre de 2014, cuando fue nombrada presidenta de Santander.
Daurella posee el 55% de Coca Cola Iberian Partners, la filial española que controlará el 34% de la nueva embotelladora europea
A través de un comité de dirección Coca-Cola determinó que no existía incompatibilidad entre su nombramiento en la compañía y la presidencia de Santander. El comité avaló que las transacciones económicas entre Santander y Coca-Cola no son determinantes y que la relación entre ambas compañías existe desde hace años, antes de los nombramientos de Botín. La compañía estadounidense reflejó que Ana Botín y su marido poseen 2.500 acciones de Coca-Cola a través de una sociedad.
De acuerdo al informe de remuneraciones de Santander publicado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Ana Botín ganó el pasado año 6,7 millones -de los que 4,8 millones correspondieron a pago en metálico y 1,8 millones por el valor de acciones del banco entregadas- y recibió una aportación a su plan de pensiones de 2,14 millones. El importe cobrado por Botín recoge también la parte relativa a sus funciones como consejera delegada de Santander UK.
El 25 de noviembre, cuando Ana Botín no llevaba todavía tres meses en la presidencia de Santander, nombró consejera independiente del banco a Sol Daurella, presidenta de Coca-Cola Iberian Partners, y que unos días antes había dimitido como consejera de Sabadell. Daurella (Barcelona, 1966) se convirtió el jueves en la presidenta de Coca-Cola European Partners, el mayor embotellador independiente de Coca-Cola a nivel mundial, resultante de la integración de Coca-Cola Enterprises Inc, Coca-Cola Erfrischungsgetränke AG y Coca-Cola Iberian Partners (la división española).
Daurella, a través de Cobega Invest, posee el 55% de Coca-Cola Iberian Partners, que en los dos últimos años ha liderado una fusión de las embotelladoras en España del grupo estadounidense, un modelo que ahora la multinacional replica a nivel europeo. Coca-Cola Iberan Partners emplea a más de 4.300 personas y el pasado año facturó más de 3.000 millones de euros.
La presidenta de la embotelladora europea de Coca-Cola ha formado parte también de los consejos de Acciona y de Ebro Foods, y en la actualidad es presidenta de Cacaolat. Es consejera de ESADE Business School; patrona de la Fundación SHE, dirigida por el Doctor Fuster; y participa en otras fundaciones. Además, preside el Teatro Nacional de Catalunya y es Cónsul honoraria de Islandia en Barcelona (es consejera de Vifilfell, embotelladora de Coca-Cola en Islandia).
Coca-Cola European Partners saldrá a Bolsa y ya ha anunciado su intención de repartir dividendos
José Daurella Franco, padre de Sol Daurella, fallecido el pasado mes de octubre, dirigió Cobega desde 1953, año en el que desde la fábrica de la familia en Barcelona salió la primera botella de Coca-Cola producida en España. Sol Daurella está casada con Carles Vilarrubí, vicepresidente de Rothschild España; la entidad ha sido el asesor financiero de Coca-Cola Iberian Partners en la fusión de las embotelladoras europeas.
La operación de integración dará lugar a un gigante del sector con ingresos estimados de 12.600 millones de dólares, que dará servicio a más de 300 millones de consumidores en 13 países y contará con una plantilla de 27.000 personas.
La división española, Coca-Cola Iberian Partners, tendrá el 34% del capital de la nueva compañía, que cotizará en Bolsa. Según informó en un comunicado Coca-Cola, la compañía tiene previsto ofrecer un dividendo por acción en el rango del 30 al 40% del beneficio neto a lo largo del tiempo. La operación aumentará aun más previsiblemente la fortuna de Daurella.
