El Gobierno ha llevado a cabo contactos con las autoridades europeas para poder quitar los plazos límite a la venta de BFA-Bankia. Según ha podido conocer Vozpópuli de fuentes comunitarias, el Ejecutivo habría pedido a la Comisión Europea su visto bueno para que España elimine la fecha límite (fijada ahora a finales de 2017) para realizar la desinversión por parte del FROB en la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, y nacionalizada desde mayo de 2012. El objetivo sería el de contar con el tiempo necesario para poder maximizar el retorno de una inversión pública de más de 22.000 millones de euros.
A pesar de las reticencias iniciales por parte del Gobierno, las reuniones se habrían llevado a cabo entre representantes de los ejecutivos español y comunitario
La iniciativa para extender de forma indefinida el plazo de venta de Bankia habría partido, según estas mismas fuentes, de la propia entidad nacionalizada. A pesar de las reticencias iniciales por parte del Gobierno (preocupado por la pérdida de credibilidad que podría suponer la solicitud de más tiempo una vez más), las reuniones se vienen desarrollando en las últimas semanas entre representantes de los ejecutivos español (en funciones) y comunitario. Es una ley nacional la que regula y pone límites a la participación del Estado en el banco, y por lo tanto es cuestión del Gobierno y el Parlamento españoles modificar esta norma, si bien "todo el tema está sujeto a la supervisión de Bruselas de forma oficial o de forma oficiosa", señalan fuentes conocedoras de estos contactos. El interés de España en este caso sería eliminar la mención a una fecha límite, con el fin de "sacar más partido a la venta y para que ésta no esté condicionada previamente por el mercado".
La supresión de los límites temporales a la inversión del FROB en BFA-Bankia supondría la eliminación de una de las últimas limitaciones impuestas por las autoridades comunitarias a la entidad nacionalizada. El objetivo de la misma sería así poder continuar con su gestión, con una menor intervención del FROB y bajo criterios de mercado, pero sin la espada de Damocles del 2017 como fecha límite, algo que podría perjudicar al comportamiento del valor en Bolsa a medida que la fecha final se fuera acercando.
Desde que se vendiera en febrero de 2014 un 7,5% de las acciones de Bankia, el Ministerio de Economía no ha vuelto a encontrar una ventana de oportunidad para realizar una nueva desinversión. Y es que la autolimitación de no vender por un precio menor de los 1,51 euros por acción de la primera colocación acelerada ha jugado en contra del valor en Bolsa. Además, cada vez que las acciones se han acercado al entorno de este precio han sufrido caídas prácticamente inmediatas. La nueva estrategia, sin un límite temporal, pretendería precisamente desactivar cualquier táctica de posibles compradores interesados jugando con el calendario.
Más valor a la inversión pública
Aunque en todo caso el cierre de las negociaciones se llevaría a cabo con el nuevo Gobierno surgido tras las Elecciones, estas conversaciones serían una continuación de las ya confirmadas por las autoridades relacionadas con la integración de BMN en Bankia, tal y como publicó este medio. A preguntas de este diario, el Ministerio de Economía ha negado cualquier contacto con la CE en este sentido.
Con BMN, Bankia adquiere posiciones dominantes en territorios como Granada, Murcia y Baleares
Tanto la estrategia de fusionar los dos bancos en manos del Estado como la supresión de la fecha límite para desinvertir forman parte de una estrategia consensuada con Bruselas para maximizar el retorno de la inversión. La integración de BMN en la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri supondría una revalorización de ambas, toda vez que el banco resultante valdría más que la suma de los dos por separado. Con BMN, Bankia adquiere posiciones dominantes y de liderazgo en territorios como Granada, Murcia y Baleares.
La fusión de Bankia y BMN sería además una suerte de detonante de la llamada nueva ola de consolidación en el sector bancario español. Esta ronda de nuevas integraciones, impulsada por el Banco de España desde hace más de un año, tendría como objetivo incrementar el tamaño medio del sector, con el fin de ganar en volumen y poder ser más rentables.