La nueva Bankia-BMN ya es una realidad. Las dos entidades nacionalizadas han aprobado en las últimas horas la fusión, que llevan negociando desde hace casi nueve meses. La última incógnita de la operación era el precio al que se valora BMN (la que no cotiza en bolsa), que ha sido de 825 millones.
La nueva entidad agrupará activos por valor de 220.000 millones, depósitos por valor de 135.000 millones, 2.400 oficinas y 17.000 empleados. Entre las dos entidades, hubieran ganado 324 millones en el primer trimestre.
La negociación ha durado más de lo esperado debido a la negociación del precio, y por ello es previsible que las juntas de accionistas no puedan aprobar la operación hasta septiembre.
La ecuación de canje es fundamental por la necesidad de cada consejo de defender a sus accionistas minoritarios. En el caso de BMN, la Fundación Pinnae creó una plataforma de minoritarios para defender sus intereses.
En esta fusión han trabajado durante los últimos meses un ejército de asesores: Morgan Stanley, Rothschild, Garrigues, EY y Accenture con Bankia; y Alantra, Uría, PwC y JPMorgan con BMN.