Bankinter será uno de los damnificados del cambio de negocio que pretende Credit Agricole. El segundo accionista de la entidad española, con un 19,4%, pretende reducir su participación en la línea del proceso de desinversiones que está efectuando con sus negocios internacionales, especialmente en Grecia e Italia. Incluso, Jean-Paul Chifflet, consejero delegado del banco galo, no oculta que Bankinter es "una de las muchas participaciones no estratégicas extranjeras que se está buscando reducir".
"Bankinter siempre ha sido una inversión que ha gustado mucho a Crédit Agricole pero el constante cambio de legislación financiera que se está viviendo en España desde principios de año, además de las condiciones para todo el sector que implicará el rescate bancario, abren la puerta a esta salida", confirman desde el sector. Mientras, en Bankinter se muestran "tranquilos y a la expectativa" ante el anuncio hecho ayer por Chifflet, en la presentación de resultados de la entidad gala que tuvo 1.667 millones de euros de beneficio en el primer semestre, un 30,8 % menos con respecto al mismo periodo de 2011.
Según datos de la entidad gala, Credit Agricole cerrará el ejercicio 2011 en números rojos, ya que realizará provisiones por valor de 2.500 millones de euros relacionadas principalmente con su negocio de inversión. De esas depreciaciones, que se contabilizarán sobre el tercer trimestre, 981 millones corresponderán a su participación en el banco español Bankinter y 364 en el portugués Espirito Santo, informó el grupo en un comunicado.
La participación de Credit Agriole rozó el 21% tras la suscripción de un importante paquete de bonos convertibles que Bankinter emitió el pasado año para alcanzar el 8% de capital principal, exigido por la última reforma financiera del gobierno socialista. Ese paquete se ha rebajado hasta el 19,4% debido a la ampliación de capital que ha realizado Bankinter por el canje de sus participaciones preferentes.
A pesar de que el banco francés es el segundo accionista de la entidad española tras Jaime Botín, que detenta el 24% de los títulos, nunca ha querido contar con ningún asiento en el consejo de Bankinter. "Jaime Botín podría aumentar su participación en caso de que finalmente Credit Agricole decida finalmente salir de Bankinter", aseguran en el sector.
Credit Agricole ultima la venta de su filial griega, Emporiki Bank, responsable de cuantiosas pérdidas en los últimos ejercicios. Además, el banco francés ha reducido significativamente su cartera de deuda soberana de los países periféricos de la zona euro (Grecia, Irlanda, Portugal, Italia y España). A 30 de junio mantenía 8.500 millones de euros de esas deudas, frente a los 15.300 millones que tenía el 31 de diciembre.
El objetivo del 'banco verde' es implementar un nuevo modelo de banco de financiación que pasará por centrarse en los grandes clientes y zonas geográficas. En este sentido, ha anunciado que planea reclutar 3.500 personas en Francia en 2012, dedicados a la "banca de proximidad".