CaixaBank está por fin a un solo paso de tomar el control de BPI. La entidad liderada por Gonzalo Gortázar ha logrado este miércoles que la junta de accionistas del grupo luso desbloquee el blindaje accionarial que había hasta ahora, que sólo permitía a CaixaBank votar por un 20% de sus títulos, a pesar de tener un 45%.
El grupo catalán tiene de esta forma más cerca que nunca que se apruebe la oferta pública de adquisición (opa) por el 100% de BPI, por la que pagaría un máximo de entre 900 y 1.000 millones.
CaixaBank ha logrado esta victoria tras 16 meses de disputas con varios accionistas del banco portugués, liderados por la angoleña Isabel dos Santos y Tiago Violas. Este último ya avanzó hace dos días su intención de desbloquear la situación.
En un acto celebrado por la mañana en Esade, Gortázar ha subrayado que CaixaBank no tiene ambiciones de crecer a nivel internacional, salvo en Portugal, donde tienen una “situación heredada” y “la mejor solución es que tomemos el control”.
Una vez se apruebe la opa, el mercado espera que CaixaBank capte capital para que su ratio de solvencia no caiga por debajo del 11%. Ganan peso una posible ampliación o la venta del 10% de autocartera, como ha piblicado este miércoles Vozpópuli. La entidad tendría que captar más de 1.000 millones, según fuentes financieras, para que su ratio de solvencia no cayera por debajo del 11%, a lo que se comprometió ante el mercado.