Ebro Foods y Deoleo lideraron ayer los descensos del mercado continuo, con una caída del 3,01% y del 3,75% respectivamente. Vozpópuli ya adelantó que Ebro había iniciado un proceso de salida del capital de Deoleo, cuyo pistoletazo de salida había sido la dimisión del consejo del presidente de Ebro, Antonio Hernández Callejas y su hombre de confianza, José Barreiro.
Esto quedó confirmado con la notificación en la CNMV pocos días después del descenso de la participación de Ebro desde el 9,9% hasta el 6,9%, es decir, un paquete del 3% de obligada notificación.
El descenso de ayer se debe a esta misma especulación: Ebro sigue vendiendo y se espera que en breve haya otra notificación de venta de otro ‘paquetito’ del 3%. La dimisión del consejo de los hombres de Ebro se debe, evidentemente, a facilitar este proceso de salida, ya que todo consejero debe notificar en el acto cualquier compra o venta de acciones, por pequeñas que sean.
Overhang
Deoleo tiene asumido que tiene un proceso de overhang por delante, por la salida de Ebro y también, más pronto que tarde, de las antiguas cajas de ahorros (sobre todo Bankia, pero también Kutxa y La Caixa), pero el tirón del valor en los últimos meses puede dar algo de respiro y facilitar que las salidas sean menos traumáticas.
El castigo a Ebro llega también por el chasco que se ha llevado el mercado. Pese a la situación de deuda de Deoleo (que ha mejorado sensiblemente, conforme puede verse en el último comunicado de la compañía), el grupo es líder mundial en aceite.
La firma de la familia Hernández también es número uno en arroces y pastas y la alianza entre ambas familias permitía soñar con un auténtico campeón mundial de la alimentación.
Deoleo está sacando adelante sus problemas de deuda. Vozpópuli puede afirmar que algunos fondos oportunistas se han acercado a los bancos acreedores preguntando por paquetes de deuda y estos no han ofrecido descuento, ya que consideran perfectamente recuperable los préstamos.