"Lo peor del Brexit no lo hemos visto todavía". Estas palabras, de Francisco González, presidente de BBVA, hace dos semanas, contrastan con lo que piensa la mayor parte de empresarios españoles y europeos.
Un informe de FTI Consulting -realizado a través de encuestas a 2.500 empresas británicas, francesas, alemanas y españolas- refleja que, lejos de alertarse por los riesgos de un Brexit duro, domina el optimismo y la complacencia: dos tercios de las compañías prevén aumentar la facturación en Reino Unido, el número de clientes y la plantilla a pesar del Brexit.
"Los resultados apuntan a una interpretación errónea de la realidad política. El Gobierno británico ha manifestado con claridad que no habrá nada acordado hasta que esté todo acordado, mientras que la UE ha dejado claro que no va a permitir que el Reino Unido escoja selectivamente las características de un acuerdo comercial. Asumiendo que se llegue a un acuerdo, habrá ganadores y perdedores. Esto podría afectar seriamente a algunos sectores", opina Hans Hack, miembro del grupo de trabajo sobre el Brexit de FTI Consulting.
Negociaciones
No sólo hay optimismo sobre los efectos del Brexit, sino que tres de cuatro empresas espera que la relación entre el Reino Unido y la UE haya quedado clara en junio de 2018, momento en el que introducirán "cambios irreversibles" en sus planes estratégicos.
En este sentido, un 65% de los encuestados considera que habrá acceso libre de aranceles para los bienes; un 59 % que se mantendrá la libre circulación de personas; y el 52 % que la jurisdicción del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) seguirá vigente. Realidades que a día de hoy parecen muy lejanas en la mesa de negociaciones Reino Unido-Europa.
Los empresarios españoles son más cautos que los británicos, franceses y alemanes
La misma sensación de ausencia de riesgos existe en el sector financiero. Siete de cada diez entidades británicas consideran que sus pasaportes financieros seguirán valiendo en la Unión Europea, un porcentaje que baja en países como Alemania (59%), España (56%) y Francia (51%).
Dentro de los distintos países encuestados, los españoles son los que se muestran más cautos junto a los británicos.