El monumental cabreo que tiene la mayoría de las comunidades autónomas por el enésimo ajuste a la retribución de las energías renovables aplicado por Soria comienza a incomodar, y mucho, en Moncloa. Han sido incesantes las llamadas de los barones autonómicos, la mayoría de ellos del mismo PP (véanse los casos de Monago, Valcárcel, Herrera…) para quejarse no sólo al ministro de Industria, ejecutor de los recortes, sino también a la Oficina Económica del poderoso Álvaro Nadal, hermano del Secretario de Estado de Energía, y por supuesto al mismísimo Mariano Rajoy, que ha tenido que aguantar incómodas quejas en las últimas semanas.
Así que toca zafarrancho en Madrid y desde Moncloa se ha pensado que hay que calmar a las huestes autonómicas con una conferencia sectorial de urgencia. Será el próximo martes en Industria. Soria y su belicoso e inaccesible número dos, Alberto Nadal, recibirán por la tarde a los consejeros de Industria y/o Energía de las CCAA para explicarles por qué se toman tan drásticos recortes con las energías renovables, y en especial con la eólica, la más rentable de todas ellas, que se ha convertido en imprescindible para el buen funcionamiento y estabilidad el sistema eléctrico, pero que en la última orden ministerial de ajustes recibe un hachazo descomunal.
El nuevo sistema de retribución a las renovables, cuyo borrador de orden ministerial ya ha vuelto a Industria con las alegaciones presentadas por las partes, elimina el tradicional sistema de primas y crea uno nuevo de incentivos en función del grado de amortización de las inversiones realizadas en las instalaciones.
A la conferencia sectorial acudirán los consejeros de las CCAA y reclamarán a Soria que suavice los recortes a las retribuciones renovables ahora recogidas en la propuesta de orden ministerial
El ajuste es muy duro para las instalaciones fotovoltaicas, también para la cogeneración (producción de electricidad con el 'calor' sobrante de los procesos industriales), pero sobre todo para la energía eólica.
Los parques eólicos puestos en marcha antes del 31 de diciembre de 2004 se quedan sin retribución, por considerar sus inversiones amortizadas. Los gobiernos autonómicos, sean del signo que sean, como Cataluña, Andalucía, Asturias, Canarias, Navarra, Galicia, Extremadura y Castilla y León, entre otros, a través de sus consejeros censurarán el próximo martes ante Soria la política antirrenovable del Gobierno.
Los nuevos recortes que prepara el Ejecutivo con la orden ministerial en marcha obligarán a cerrar a muchas instalaciones esencialmente fotovoltaicas, pero también eólicas, de cogeneración, biomasa y termosolar.
Soria y Nadal tratarán de convencer a los enviados de los barones autonómicos de que ésta es la única forma de frenar la sangría que año tras año provocan las primas renovables (más de 8.000 millones de euros en 2013) en las cuentas del sistema eléctrico, que ya acumula un déficit de tarifa superior a los 28.000 millones de euros.
Pero enfrente estarán consejeros muy combativos como el asturiano, el extremeño, el navarro o el catalán, entre otros, cuyos presidentes autonómicos han sido muy críticos con la política energética del Gobierno. De hecho, varias CCAA han presentado o preparan recursos de inconstitucionalidad contras las medidas del Ejecutivo.
Ya lo hicieron Extremadura, Murcia y Navarra, entre otras, por los ajustes fotovoltaicos, y así lo prepara Cataluña, por ejemplo, contra la Ley del Sector Eléctrico, aprobada a finales de diciembre pasado.
