Pocas veces unas palabras pueden haber salido tan caras. Antonio Pulido, expresidente de Cajasol y Banca Cívica y actual presidente de la Fundación Cajasol, se expone a una denuncia del Congreso de los Diputados por un presunto falso testimonio en su declaración del pasado 27 de febrero. Todo está pendiente de una consulta que el Parlamento ha hecho a la Audiencia sobre la imputación de Pulido, según fuentes parlamentarias consultadas por este medio.
Un fallo de cálculo que podría acarrear a Pulido incluso pena de prisión: "El que convocado ante una comisión parlamentaria de investigación faltare a la verdad en su testimonio será castigado con la pena de prisión de seis meses a un año o multa de 12 a 24 meses", reza el artículo 502.3 del Código Penal.
El conflicto se origina cuando el diputado de Unidos Podemos, Alberto Montero, subrayó que tanto Pulido como su homólogo en Banca Cívica, Enrique Goñi, estaban imputados por su papel en la salida a bolsa de la entidad, en 2011.
Pulido reaccionó con contundencia: "Ha hablado de una cosa que pido que rectifique porque no es cierta. Ha dicho que yo estoy imputado. Yo no estoy imputado en nada y, si no, le pido que me traiga esa imputación. Se lo exijo, no se lo pido. Eso afecta al honor".
Choque polémico
Tras un tira y afloja, Montero cedió y rectificó: "Si en principio esos son los términos en los que se encuentra el proceso, bien. Pero creo recordar que hay un compromiso de decir la verdad en esta Comisión y esperemos que sea cierto".
Sin embargo, la Comisión de Investigación ha consultado de manera informal a la Audiencia y esta imputación sí que seguiría en vigor. Por ello, la Comisión presidida por Ana Oramas ha pedido certificado por escrito a la Audiencia Nacional. En caso de que llegue, el Congreso tomará una decisión que podría implicar una denuncia contra Pulido.
Pulido sostiene que ha dejado de estar imputado en la Audiencia a pesar de que el caso se amplió el año pasado
El propio presidente de la Fundación Cajasol reconoció que el caso Banca Cívica, que investiga una presunta estafa en la salida a bolsa, sigue abierto: "Se ha prorrogado por ser un caso complejo, pero no hay nadie imputado", matizó. Sin embargo, la única información publicada al respecto, por Efe, señala a Pulido como imputado. En tal caso, podría ser denunciado por falso testimonio.
La comparecencia del antiguo responsable de la caja andaluza también ha suscitado dudas por una de sus respuestas sobre la Junta de Andalucía. Pulido tuvo que responder sobre sus decisiones de convertir a Caja Guadalajara en una filial de la Fundación Cajasol. Y sobre su remuneración como presidente de la Fundación, de 200.000 euros:
"Me pregunta si la Junta de Andalucía lo tenía aprobado. Por supuesto que sí y el patronato lo sabe. Los miembros del patronato pertenecen a todo el arco institucional y político y lo saben perfectamente. Le digo cuál fue el día exactamente: fue aprobado por la junta el día 29 de diciembre", zanjó Pulido.