La empresa Cata, del grupo catalán CNA, ha logrado hacerse con todos los activos productivos de la concursada Fagor Electrodomésticos, que reanudará la actividad de su planta de Arrasate el próximo mes de octubre. El Juzgado de lo Mercantil número 1 de San Sebastián ha dictado un auto por el que, atendiendo al deseo de la administración concursal de la emblemática cooperativa de la Corporación Mondragón, adjudica todas las unidades productivas de Fagor Electrodomésticos a CNA (Cata), el grupo que ofrecía más dinero (38,5 millones, más 4 por créditos de clientes) y prometía más empleo (705 puestos de trabajo directos el primer año), según informa Efe.
CNA ha logrado la compra de todas las fábricas de Fagor y Edesa, lo que incluye las de Gipuzkoa (Eskoriatza, Arrasate y Bergara) y también la vizcaína de Basauri, además de hacerse con la explotación de las marcas Fagor, Aspes, Edesa y Splendid. Su oferta era muy superior a la del grupo argelino Cevital, que ofrecía 28 millones y 500 empleos, por lo que el juez no ha tenido dudas y ha dejado claro en su auto que el planteamiento de los catalanes servía mejor a todos los objetivos del concurso de acreedores. La adjudicación de Fagor y el anuncio de la reanudación de la actividad en octubre han sido saludados por los Gobiernos vasco y catalán, los sindicatos -que han pactado con Cata las condiciones laborales de los futuros trabajadores- y la propia Corporación Mondragón.
A las pocas horas de conocerse la adjudicación, los directivos de CNA han escenificado su "desembarco" en Fagor al ofrecer una rueda de prensa en el "showroom" de la planta de la antigua cooperativa en Arrasate, donde han explicado los planes industriales diseñados para poner en marcha todas las plantas del grupo, hacerlas rentables y recuperar en tres años los niveles de facturación que la empresa guipuzcoana tuvo en 2012 (220 millones de euros).
CNA ya cuenta con aprovisionamientos para comenzar a fabricar productos de la línea de cocción en la planta de Galagarza (Arrasate) en octubre, y ha comenzado la selección del personal, que se nutrirá de manera prioritaria de los antiguos socios cooperativistas de Fagor y los extrabajadores por cuenta ajena de la cooperativa, de Edesa y la filial Grumal. Además ha perfilado ya un equipo directivo formado "casi en su totalidad" por exsocios y empleados de Fagor Electrodomésticos, "gente del País Vasco, que han estado muchos años defendiendo los colores de Fagor", según ha dicho el administrador de CNA Corporación, Jorge Pardalé.
El grupo catalán espera que Fagor sea rentable en el transcurso el primer ejercicio de actividad, en el que espera alcanzar una facturación de entre 110 y 120 millones de euros, gracias al posicionamiento de una marca que, a su juicio, no ha perdido la confianza de los clientes. La fábrica de Edesa de Basauri, incluida en la última oferta de CNA, también retomará su actividad, aunque lo hará en una segunda fase, tras la reactivación del resto de líneas de negocio.
La adjudicación ha sido alabada por la consejera vasca de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, quien ha pedido al grupo catalán que recupere "cuanto antes" el valor de la marca Fagor y el empleo. La actitud del Gobierno Vasco ante la implantación de la firma Cata en Euskadi será "la misma que ha mantenido en cada ocasión que una empresa apuesta por la actividad industrial y por el empleo de Euskadi", ha resaltado la consejera.
La Diputación de Bizkaia ha pedido a la empresa catalana que mantenga el nivel de empleo de la factoría de Edesa en Basauri, un deseo compartido por los trabajadores de esta planta, que se han mostrado "contentos" porque el grupo catalán pretende reabrir esta unidad. También la Generalitat de Cataluña ha celebrado la decisión del juez, al entender que la adquisición de Fagor permitirá a Cata "reforzar su proyecto industrial y complementar las líneas de producción que tiene en Torelló, donde trabajan 150 personas".
Los trabajadores también han aplaudido la venta y tanto ELA como LAB han recordado que han acordado con Cata las condiciones laborales de los futuros trabajadores de Fagor, que cobrarán según lo establecido en el convenio del metal de Gipuzkoa, más la actualización del IPC, aunque no podrán conservar su antigüedad. La Corporación Mondragón, a la que pertenecía Fagor Electrodomésticos -fue de hecho la cooperativa fundadora del grupo-, ha deseado éxito a Cata y se ha felicitado por el número de empleos que prevé crear y por su intención de mantener el grueso de la producción en el País Vasco.