Carlos Slim, primer accionista de FCC, ha marcado como objetivo prioritario cerrar la ampliación de capital que prepara el grupo antes de que finalice el presente ejercicio. El magnate mexicano quiere finiquitar el asunto de la refinanciación antes del inicio de 2016, el ejercicio en el que la compañía debería empezar a crecer tras un severo saneamiento de tres años. Entre otras, por cuestiones fiscales, ya que Slim pretende que la compañía se beneficie de la reducción de la deuda en el conjunto del próximo año.
De ahí que las negociaciones para la ampliación se hayan convertido en una especie de cuenta atrás. Slim pretendía que la operación pudiera aprobarse en la reunión que el consejo de administración mantuvo este miércoles, en la que se dio el visto bueno a los resultados de los nueve primeros meses del ejercicio. Por cuestiones de tiempo, era el último consejo ordinario en el que podía darse luz verde a la ampliación para que ésta pudiera completarse antes del 31 de diciembre.
Pero el asunto no formó parte del orden del día de la reunión. Para que esto hubiera sido posible, las negociaciones con la banca deberían haberse cerrado por completo, algo que no sucedió. Como ya sucediera en la ampliación de 1.000 millones de euros que hizo FCC en 2014, la compañía pretende obtener una quita por parte de la banca en la amortización de la deuda restante relacionada con el denominado tramo B, el que mayor interés presenta.
El grupo necesita el respaldo de al menos el 75% de los acreedores para proceder a la homologación del acuerdo y forzar así al resto a aceptar las condiciones.
Posible consejo extraordinario
Sin embargo, a la compañía le faltaba el apoyo de al menos una de las entidades financieras que componen el grueso de los acreedores, cuya suma es fundamental para alcanzar ese 75% que le permita a la compañía asegurarse el éxito de la refinanciación. Según señalaron a Vozpópuli en fuentes financieras, la quita que pretende aplicar FCC, en torno al 15% (como la registrada en el acuerdo del año pasado) es el principal obstáculo que ha impedido, por el momento, obtener el suficiente apoyo de la banca a la operación.
Las citadas fuentes no descartan aún que la ampliación pueda realizarse antes de que finalice 2015, aunque para ello FCC tenga que recurrir a un consejo extraordinario para aprobar la operación, algo que ya hizo el pasado año. En este caso, las circunstancias son distintas, las urgencias no son tantas pero tanto Slim como las entidades financieras ven con muy buenos ojos cerrar la ampliación este año.
La compañía debería llevar a cabo el correspondiente road-show para anunciar la operación y captar la atención de los inversores
No obstante, para que esto suceda tendrá que haber acuerdo y, por el momento, FCC no cuenta con todo el apoyo que necesita para llevar a cabo la operación. En cualquier caso, el grupo deberá ya recurrir a una reunión extraordinaria de su consejo para llegar a tiempo. Aunque la junta de accionistas ya dio en su día la autorización para ampliar hasta el 50% del capital, la compañía debería llevar a cabo el correspondiente road-show para anunciar la operación y captar la atención de los inversores, así como poner en el mercado los derechos de suscripción.
Estos procesos llevan prácticamente un mes, con lo que el consejo extraordinario debería llevarse a cabo en los próximos días para que la liquidación de la ampliación llegara a tiempo de realizarse antes de fin de año.