Hace aproximadamente un año, los precios de la electricidad comenzaron una escalada alcista que generó una notable alarma social y que obligó al ministro de Energía, Álvaro Nadal, a no pocas comparecencias públicas para dar explicaciones y anunciar medidas. Doce meses después, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha anunciado la apertura de un expediente sancionador contra Gas Natural Fenosa y Endesa, a las que acusa de supuestas prácticas contrarias a la Ley en las ofertas de determinados ciclos combinados para alterar los precios de la electricidad. Un proceso que se prolongará, como poco, hasta mediados de 2019 y que se sustanciará con una sanción, como máximo, de seis millones de euros para las compañías.
El organismo regulado considera tener indicios de que Gas Natural y Endesa presentaron al mercado ofertas de precio en algunos de sus ciclos combinados "de carácter anormal o desproporcionado", según se recoge en el expediente al que ha tenido acceso Vozpópuli. El procedimiento sostiene la tesis de que las compañías realizaron ofertas a precios muy elevados para que no pudieran casar en el mercado y pasaran, de este modo, al proceso de solución de restricciones técnicas (reservado a situaciones especiales, de muy elevada demanda, en la que se hace necesaria la participación de la práctica totalidad de las instalaciones de generación).
"Esta conducta dio lugar a que, en varios días del período comprendido entre octubre de 2016 y enero de 2017 en los que las centrales se encontraban disponibles, las ofertas no fueran casadas en el mercado diario, produciéndose el resultado efectivo de una alteración indebida del despacho de las unidades de generación", aclara el expediente.
Este proceso se ha visto envuelto de polémica prácticamente desde sus orígenes. A comienzos de 2017, el presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, anunció públicamente el inicio de las investigaciones, una práctica para nada habitual en un organismo que se caracteriza por su discreción hasta que sus procedimientos están firmemente encaminados.
Procedimiento interminable
La actitud de Marín Quemada generó malestar entre las eléctricas al considerar que quedaban directamente señaladas por la subida de los precios en el mercado aun sin ningún indicio de presuntas irregularidades. Pasado el tiempo, la CNMC asegura tenerlos y, de hecho, seguirá adelante con un procedimiento que, pese a la gravedad de los hechos que denuncia, no es especialmente significativo en cuanto a la sanción para las compañías implicadas.
Además, el proceso no ha hecho sino comenzar. Tras el preceptivo periodo de alegaciones (en teoría, 15 días hábiles a partir del 30 de noviembre, día en que fue comunicado, aunque algunas de las empresas ha solicitado algo más de tiempo para presentar la documentación), se abre un periodo de 18 meses en los que la CNMC continuará con sus investigaciones además de estudiar las alegaciones de las compañías.
Es decir, como pronto hasta mediados de 2019 no se conocerá el resultado final del expediente. Si las empresas recurren el fallo ante los tribunales, la solución definitiva se demorará aún más.
Fuentes de Endesa aseguran que el expediente carece de todo sentido porque la propia compañía ha sido penalizada por la fuerte subida de los precios de la electricidad, como prueba su cuenta de resultados. La empresa que preside Borja Prado argumenta además que el expediente sancionador de la CNMC incluye tan sólo a uno de sus ciclos combinados, cuando la compañía realiza siempre las mimas ofertas de precios con todas sus plantas de este tipo, de manera que la supuesta irregularidad se habría cometido con todas ellas.
Suspicacias
Por su parte, Gas Natural argumenta que la CNMC le acusa de realizar ofertas en centrales de referencia a un precio que resulta superior al de los costes marginales entre octubre de 2016 y enero de 2017 cuando, en realidad, es una práctica habitual con el fin de tratar de cubrir los costes fijos de unas instalaciones que, además, permanecen durante prácticamente todo el año detenidas. Según la compañía, la utilización media anual de sus ciclos combinados apenas alcanza el 12%. Los números del negocio de generación de la compañía apuntan a pérdidas de 375 millones de euros durante el ejercicio 2016.
Fuentes del sector aseguran que en el periodo investigado por la CNMC se dieron ofertas mucho más elevadas que las realizadas por Gas Natural y Endesa para sus ciclos combinados, con la diferencia de que no lograron casar órdenes. En cualquier caso, las acusaciones han ido directamente hacia estas dos empresas, afectadas por la medida de Energía de ser designadas creadores de mercado del gas, lo que les obliga a introducir ofertas en el Mibgas para incrementar su liquidez y permitir una distensión de precios. Intento vano, toda vez que apenas un 6% del gas comercializado en España se mueve en este mercado.
Las suspicacias, a la orden del día, también se han desatado por la cuantía de la sanción, que se considera prácticamente menor para estos casos. Las eléctricas consideran que el verdadero daño es el reputacional y que ése ya está hecho. Mientras, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) valoró positivamente la actuación de la CNMC y pidió "sanciones ejemplares" para las empresas, algo que no parece que vaya a producirse.