Un centenar de especialistas del sector agroalimentario se reunieron en Madrid para analizar el futuro de la agricultura española en la tercera edición del Agri Data Green Summit, que por primera vez se ha celebrado en España y ha contado con la participación de destacadas marcas del sector de la alimentación, como Grupo Gallo.
El objetivo era desarrollar nuevas estrategias y aplicar la tecnología adecuada para hacer frente al impacto de la sequía en la cadena de suministro. En esta tercera edición, el Agri Data Green Summit se ha centrado en las perspectivas de futuro para la agricultura ibérica y mundial, poniendo énfasis en el desarrollo tecnológico como vía de solución para paliar los efectos del cambio climático en el sector de la agroalimentación.
El responsable de Trigo de Grupo Gallo, José Chacón, participó en la mesa redonda ‘Garantizar la calidad de las cadenas de suministro agroalimentarias: experiencias de Europa y América Latina’, en la que se han explorado soluciones para mantener la calidad de los procesos y los productos en toda la cadena de valor.
Para lidiar con la heterogeneidad de calidades de trigo que Grupo Gallo ha recibido durante la reciente campaña, altamente condicionada por la sequía, la compañía ha aplicado un seguimiento de los procesos de cultivo para garantizar la calidad del producto final, la pasta.
“Tradicionalmente en Gallo se recepcionan más de veinte mil toneladas de trigo duro, este año no hemos llegado a nueve mil. Por suerte, en Grupo Gallo hemos conseguido asegurar la estabilidad de la calidad en nuestros productos finales gracias a un buen seguimiento de las condiciones de cultivo a lo largo del año”, comentó el responsable de trigo de Grupo Gallo.
Chacón explicó en la mesa redonda el acompañamiento que Grupo Gallo brinda a todos sus agricultores andaluces de trigo duro en sus decisiones, desde el inicio del ciclo productivo hasta el final, siendo esta una de las claves para asegurar la calidad en la cadena de suministro del trigo. “Los agricultores son la base de la calidad de Gallo. Gracias al acompañamiento del agricultor, cuando llegamos a la parte del aprovisionamiento somos capaces de saber con qué cantidad y con qué calidad contamos en el campo y podemos hacer una planificación más certera de qué necesitamos”, añadió.
Las cadenas de suministro agrícola son cada vez más exigentes con el objetivo de adaptarse al actual contexto de incertidumbre creciente, derivada del cambio climático y en especial la sequía
Las cadenas de suministro agrícola son cada vez más exigentes con el objetivo de adaptarse al actual contexto de incertidumbre creciente, derivada del cambio climático y en especial la sequía. Por ello, Grupo Gallo indicó que ha colaborado durante los últimos años con proyectos andaluces que contribuyan al desarrollo de variedades que resistan las condiciones meteorológicas adversas. “Grupo Gallo interviene en todo el proceso, desde la selección varietal, de la mano de iniciativas como Agrovegetal, con acuerdos exclusivos de compra del trigo duro con varias cooperativas de Andalucía. Y la posterior elaboración de la sémola en molinos propios, en el que se gestionan las más altas calidades para la producción y distribución de la pasta con marca Gallo”, relató Chacón..
Además de acompañar al sector agrícola en una cosecha atípica marcada por la sequía, dijo que Grupo Gallo ha hecho un esfuerzo técnico para garantizar la calidad de sus productos. “Consideramos", expuso, "que nuestra obligación era la de dar la seguridad de compra a los agricultores para poder gestionar sus producciones en el mercado y, por ello, Gallo abrió sus puertas para todo el trigo que se entregó durante los meses de campaña de cereal. Desde Grupo Gallo se ha hecho un esfuerzo técnico para que la calidad del producto se mantenga en los estándares que caracterizan nuestra pasta, de manera que el consumidor no note el estrés al que se ha visto sometido el campo”.