El consejero delegado de Banco Sabadell, Jaime Guardiola, señala que la entidad "hará ajustes en riesgos y comerciales" en función de lo que pase este viernes en el Parlament y en el Senado. Esta entidad ya ha movido la sede a Alicante y la oficina del presidente a Madrid. Guardiola no comenta sobre "la deslealtad" de otras entidades con depósitos.
Guardiola ha hecho estas declaraciones durante la presentación de resultados del tercer trimestre, periodo en el que la entidad ha aprovechado para provisionar más de 1.100 millones su cartera inmobiliaria, y así alcanzar una cobertura de los activos tóxicos del 51,4%, por encima de la media del mercado (del 50%).
A pesar de ello, Sabadell ha alcanzado en los nueve primeros meses del año un beneficio neto de 653,8 millones de euros, lo que supone un 1,1 % más que en el mismo período de 2016.
La entidad mantiene el objetivo de lograr un beneficio de 800 millones a final de año. Sabadell ha conseguido que su resultado no se resienta a pesar de las provisiones con plusvalías, tras la venta de Sabadell United Bank (filial norteamericana) y parte de Mediterraneo Vida. Está pendiente de aprobación el traspaso de su filial de hoteles, HIP, a Blackstone. El grupo usará estas ganancias para alcanzar una ratio de capital de máxima calidad del 13%.