Las tres multinacionales españolas que más han apostado en la última década por las energías alternativas y el mercado estadounidense -Iberdrola, Abengoa, y Gamesa- suman 9,9 millones de dólares en pagos realizados en Estados Unidos a grupos de presión que pudieran influir en la política energética del país. La compañía española que más recursos ha destinado a lobbys estadounidenses ha sido Iberdrola, en total seis millones de dólares desde el año 2006, de acuerdo a datos consultados por Vozpopuli en la web del Senado de EE UU y en el portal especializado Opensecrets.org. La cantidad ahora puede resultar ineficaz ante la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y el cambio de la política energética que quiere realizar en su mandato. Un giro hacia energías más tradicionales frente a las renovables. Precisamente, la mayor parte de los lobbys a los que han apoyado económicamente las compañías españolas potencian las energías verdes.
Iberdrola inició el desembarco en Estados Unidos en el año 2006. Ese año adquirió Community Energy, empresa que contaba entonces con una cartera de proyectos de 2.000 MW de potencia eólica en la costa Este, por 23,8 millones de euros, y creó la filial Iberdrola Renewable Energies USA, con sede en Virgina del Norte. Ya en 2006 la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán destinó 90.000 dólares al pago de lobbys que favorecieran este tipo de energía.
La multinacional española se ha convertido en una de las compañías energéticas de referencia en Estados Unidos después de que en 2015 fusionara Iberdrola USA con UIL Holdings, dando lugar a Avangrid. En la actualidad Iberdrola posee el 81,5% de Avangrid, con activos bajo gestión valorados en 31.000 millones de dólares, siendo la segunda mayor compañía eólica del país. El pasado año Sánchez Galán anunció que Avangrid, que cotiza en Wall Street con un valor de mercado cercano a los 11.500 millones de dólares, invertirá 9.500 millones de dólares en el mercado estadounidense entre 2016 y 2020.
Coincidiendo con la puesta en marcha de Avangrid, Iberdrola potenció los pagos a lobbys en Estados Unidos. En 2015, de acuerdo a los datos consultados, el grupo español pagó 652.000 dólares, 12.000 dólares más que en 2014. Y el pasado año la cantidad ascendió a 680.000 dólares, 170.000 dólares al trimestre.
Abengoa lleva más de una década con presencia en el mercado de Estados Unidos en las áreas de bioenergía, energía termosolar y tratamiento de agua. La compañía sevillana suma 2,5 millones de dólares pagados desde 2006 a lobbys estadounidenses. Entre 2006 y 2010 aportó cada año entre 120.000 y 270.000 dólares a este tipo de grupos de presión.
En 2011 fue cuando la compañía energética destinó la mayor cantidad a influir en la política energética del país a través de lobbys, 570.000 dólares. Ese año Abengoa cerró la financiación de su mayor proyecto en Estados Unidos, la planta termosolar Mojave, que emplea colectores cilindroparabólicos, con una inversión prevista de 1.600 millones de dólares.
A pesar de Trump, la filial en Estados Unidos de Abengoa vale ahora en Bolsa más que hace un año
Entre 2012 y 2014 Abengoa destinó cada ejercicio 280.000 dólares a lobbys estadounidenses. En 2015 la empresa, a pesar de que en noviembre de ese año se declaró en preconcurso de acreedores, pagó a este tipo de grupos de presión 290.000 dólares, a través de Abengoa Solar.
En la actualidad el principal negocio de Abengoa en Estados Unidos es su participación, del 42%, en Atlántica Yield, que cotiza en el mercado Nasdaq, y que ha ido aglutinando en los tres últimos años los proyectos de la compañía española en el país.
Gamesa cuenta con más de 5.000 MW instalados en la actualidad en Estados Unidos. La compañía española, que ha aprobado su fusión con el negocio eólico de Siemens, adquirió en 2002 el 75% del grupo eólico estadounidense Navitas mediante una ampliación de capital que supuso un desembolso de dos millones de euros.
De acuerdo a los datos consultados, Gamesa destinó 1,4 millones de dólares a lobbys en Estados Unidos entre los años 2010 y 2013. El año que más dinero invirtió en este concepto fue en 2011, cuando pagó 560.000 dólares a grupos de presión. El último año en el que figura un registro de pagos de Gamesa a lobbys es en 2014, con sólo 10.000 dólares.
