La agencia de calificación de riesgos Standard and Poor´s (S&P) ha rebajado hoy un escalón, desde “BBB+” hasta “BBB” y con perspectiva “estable”, la nota de la deuda a largo plazo de la compañía, por considerar que, “a pesar de su fuerte compromiso por mejorar su calidad crediticia, el plan estratégico de Iberdrola hasta 2014 podría fallar en la mejora” de su nota, por el retraso en la titulización del déficit de tarifa eléctrico y las dificultades macroeconómicas en los principales mercados en los que opera la empresa.
La eléctrica apunta al retraso en la colocación del déficit de tarifa como principal causa de la rebaja. Fuentes de Iberdrola explican que esta se debe, en gran parte, a que no podrá cumplir el ratio de más del 20% de fondos generados en operaciones (FFO) sobre deuda necesario para mantener el rating BBB+. Y lo atribuyen, “fundamentalmente, a los posibles retrasos en recibir los 3.022 millones de euros pendientes de cobro del déficit de tarifa que Iberdrola acumula al cierre de septiembre de 2012”.
“S&P afirma que si el Tesoro colocase el déficit pendiente, el ratio FFO/ deuda neta sí podría mejorar hasta el 20%”, recuerdan fuentes de la compañía.
A pesar de que las compañías eléctricas han transferido al FADE, la entidad dependiente del Tesoro que gestiona las titulizaciones del déficit, 7.000 millones de euros de derechos de cobro correspondientes al déficit ex ante de los ejercicios 2010, 2011 y 2012 y de que el folleto de emisión fue aprobado por la CNMV el pasado 5 de octubre, “el Tesoro no ha ejecutado emisiones significativas, salvo algunas colocaciones privadas de pequeño importe”, señala Iberdrola.
Para el corto plazo, la agencia mantiene el rating A-2 con perspectiva estable, debido al fuerte perfil de liquidez del grupo y el acceso de Iberdrola a los mercados y a la financiación bancaria.