España sufrió ayer una sesión de vértigo en los mercados, con un durísimo castigo a los principales valores del Ibex. Llamó la atención el hundimiento de Telefónica, digno de un valor de pequeña capitalización. En pleno ataque al euro, los fondos deshacen posiciones y a la operadora le toca la peor parte, ya que es la mayor compañía de la Bolsa española. Tampoco ayudaron los insistentes rumores que se escuchaban sobre una contraoferta de la operadora sobre KPN, en respuesta a Carlos Slim.
El Ibex cedió un 3,3% al cierre ayer, perdió los 6.500 puntos y Telefónica se hundió un 4,9%, hasta 9,5 euros. Sólo le superaron Gamesa, Mittal, Abengoa, FCC y Sacyr, compañías mucho más pequeñas, penalizadas por el declive de la construcción o las energías renovables, acostumbradas entre otras cosas a pelear con la presión de los fondos bajistas. No es el sitio donde se suele ver a la entidad que preside César Alierta que, sin embargo, pierde un 19% anual.
El día fue negro para las telecomunicaciones en general. Telecom Italia perdió lo mismo que Telefónica, mientras France Telecom y Deutsche Telekom también sufrieron un duro castigo.
La falta de acuerdo en el Eurogrupo sobre las compras del Banco Central Europeo (BCE) y la cada vez menos lejana probabilidad de la salida de Grecia del euro son los motivos que justifican el varapalo. Lo cierto es que “se trata de un ataque al euro, no sólo a España”, comentaba Jesús Sánchez Quiñones, director generael de Renta 4. “Si uno se molesta en leer informes de casas estadounidenses, lo que se dice en ellos; no sólo de España, sino de la Eurozona, es demoledor, dan por finiquitada a la moneda única”.
Sobre Telefónica, Sánchez Quiñones conocía perfectamente el rumor sobre la contraoferta de KPN. En su opinión, tendría sentido y “lo hemos valorado en su momento como un elemento de riesgo sobre el valor, pero, aunque KPN está más barata que nunca, no están las cosas como para hacer grandes operaciones ahora”.
La holandesa ha sido histórico objeto de comentarios sobre una posible por parte de Telefónica, cosa que no ha cristalizado nunca. Pero la oferta de América Móvil ha relanzado esta posibilidad, en una respuesta a Carlos Slim que no sería la primera vez que la firma española ofrece, ya que se le adelantó también en Telecom Italia.
Un gestor añadía que “se comenta en mercado que en Telefónica los expertos de corporate llevan varios días haciendo números para plantearse esa operación... no hay mucho más, aunque eso hundiría más la cotización”.
Los fondos sueltan lastre
Sánchez Quiñones quita importancia a esa posibilidad, señalando que lo que hay realmente es una huida de inversores internacionales, que deshacen posiciones por países. Telefónica es el principal valor del Ibex y el que más pesa en las carteras, por lo que se lleva la mayor cantidad de papel. En la propia compañía reconocen que “cuando hay penalización por ‘riesgo España’, como es el caso, siempre llevamos la peor parte, por delante de los dos grandes bancos”.
Habrá que ver el alcance de esta penalización. Antonio Banda, responsable en España de la gestora estadounidense Brandes Investment, quita algo de hierro al asunto, comentando que “este pánico ya lo hemos visto en meses anteriores. Están vendiendo los ETF (fondos cotizados) y los fondos indexados que son los que fomentan los movimientos extremos”.
Su entidad, que aplica el estilo de gestión value, basado en la selección de empresas buenas a precios atractivos, no tira la toalla con España: “tenemos telefónicas y hemos entrado en Repsol. Seguro que a cierre de año nos habrá ido bien. Desde luego el mercado se está poniendo barato, y los políticos no van a permitir que el Euro se rompa”.
Pero lo cierto es que, de momento, España está siendo borrada de las carteras anglosajonas y Telefónica va en primer lugar del éxodo forzoso. A distancia, le siguen Santander, que ayer retrocedió un 3% y BBVA -4%. Parece claro que se puede repetir en nuestro país el ejemplo del EuroStoxx, en el que la cervecera Anheuser se ha convertido en la mayor compañía. Todo un reequilibrio de fuerzas. Inditex supera ya al banco de Emilio Botín y está a tiro de piedra de superar en capitalización a Telefónica. La operadora vale 43.300 millones e Inditex 42.200. Las empresas de consumo doméstico son los colosos que cuentan con el favor de los mercados en detrimento de bancos, energéticas y operadoras.